En Kansas City, dos hombres han sido acusados de asesinato después del tiroteo de la semana pasada que mató a una persona e hirió a otras 22 al final del desfile del Super Bowl de los Kansas City Chiefs.

Los fiscales de Missouri dijeron que Dominic Miller y Lyndell Mays han sido acusados de asesinato en segundo grado y otros cargos.

Han estado hospitalizados desde el tiroteo, dijo la fiscal del condado de Jackson, Jean Peters Baker.

Los funcionarios se negaron a responder si los hombres estaban siendo tratados por heridas de bala u otras lesiones.

Los registros judiciales describen de manera básica cómo se desarrolló el tiroteo.

Según los fiscales, los hombres no se conocían antes del tiroteo.

Estaban entre varias personas discutiendo cuando Mays "sacó su pistola primero casi de inmediato" y varios otros hicieron lo mismo, dijo la fiscal del condado de Jackson, Jean Peters Baker.

La policía dijo que fue la pistola de Miller la que disparó el tiro que mató a Lisa Lopez-Galván, una locutora de radio local y madre de dos hijos que había estado en el desfile.

Los registros judiciales en línea no mencionaron abogados que pudieran comentar en nombre de los hombres.

La Oficina del Defensor Público del Estado de Missouri dijo que las solicitudes de defensores públicos para los hombres aún no se habían recibido en la oficina de Kansas City.

Los nuevos cargos llegan después de que dos menores fueran detenidos la semana pasada por cargos relacionados con armas y resistencia al arresto.

Las autoridades dijeron que es posible que se presenten más cargos.

"Quiero que entiendan: buscamos responsabilizar a cada tirador por sus acciones ese día.

Cada uno", dijo Baker.

"Así que aunque aún no estamos allí con cada individuo, lo conseguiremos." La policía ha dicho que una disputa entre varias personas llevó al tiroteo, que ocurrió incluso cuando 800 agentes de policía patrullaban la celebración.