La vicepresidenta Kamala Harris lanza oficialmente su campaña para las elecciones de 2024, centrándose en los puntos débiles de Donald Trump.
Washington: Kamala Harris ha dado el pistoletazo de salida a su campaña presidencial de 2024 con una estrategia bien definida para enfrentar a Donald Trump.
Su primera parada como candidata se produjo poco después de que Joe Biden anunciara su retirada de la contienda electoral y respaldara a su vicepresidenta.
Harris se dirigió a la sede de su campaña en Wilmington, Delaware, donde un grupo de antiguos colaboradores de Biden se había reunido para respaldar sus esfuerzos con el objetivo de llevarla a la Casa Blanca.
Durante su intervención, la ex fiscal hizo hincapié en su trayectoria legal y en su capacidad para hacer frente a lo que considera las malas acciones de Trump.
En su discurso, Harris recordó su experiencia como fiscal en el condado de Alameda, cerca de su ciudad natal, Oakland, California, donde se centró en casos de abuso sexual.
Este aspecto es relevante dado que Trump fue hallado culpable en el pasado por abuso sexual contra la escritora E. Jean Carroll.
Además, como fiscal general de California, se enfrentó a una de las mayores universidades con fines de lucro del país, lo que llevó a su cierre.
En contraste, Trump estuvo al frente de Trump University, una institución educativa que fue acusada de estafar a sus estudiantes y que terminó pagando millones en compensaciones.
Durante la crisis hipotecaria de finales de la década de 2000, Harris también tuvo un papel activo al responsabilizar a los bancos por fraudes, mientras que Trump fue recientemente declarado culpable de 34 delitos relacionados con la falsificación de documentos comerciales para encubrir un escándalo sexual con una estrella del cine para adultos.
‘Escúchenme bien cuando digo que conozco el tipo de personas como Donald Trump.
Y con orgullo pondré mi trayectoria ante la suya’, declaró Harris, mientras el público la ovacionaba.
Con un desafío claro, Harris busca conectar con los votantes enfatizando su experiencia en la lucha contra el crimen y las injusticias, presentándose no solo como una candidata viable, sino como una alternativa firme y preparada frente a un oponente polémico.
La inauguración de su campaña marca un cambio drástico en el panorama político a poco menos de cuatro meses de las elecciones.
Harris, quien ha sido una figura de alto perfil en el gobierno de Biden, ahora se posiciona para tomar las riendas ante su posible oponente, un desafío que será clave en su carrera en busca de la presidencia.
El ascenso de mujeres en la política ha sido significativo en la última década, y Harris representa una de las voces más fuertes en este movimiento.
Con una historia de lucha por los derechos y el bienestar de los ciudadanos, su campaña está destinada a atraer tanto a votantes tradicionales como a nuevos electores, en un momento donde las divisiones políticas son más evidentes que nunca.