El expresidente brasileño Jair Bolsonaro abandona el hospital tras una intervención que duró tres semanas, en medio de tensiones políticas y debates sobre su estado de salud. La operación se realizó debido a una obstrucción intestinal relacionada con una herida de puñalada en 2018.

Imagen relacionada de jair bolsonaro recibe el alta desde brasilia

Jair Bolsonaro, el expresidente de Brasil, fue dado de alta este domingo tras permanecer durante casi un mes en recuperación en un hospital de Brasilia.

La noticia ha generado gran expectativa en el país, dado el contexto político y la salud del exmandatario, quien fue sometido a una compleja intervención quirúrgica abdominal.

La operación se realizó el 13 de abril en la clínica privada DF Star, ubicada en la capital, y fue necesaria debido a una obstrucción intestinal que surgió como complicación de una herida de puñalada que sufrió en 2018, durante un acto de campaña electoral.

El exmandatario, de 69 años, fue ingresado en el hospital el 11 de abril, después de experimentar fuertes dolores abdominales. Desde ese momento, permaneció en terapia intensiva durante 17 días, en donde recibió atención especializada. La cirugía fue considerada de alta complejidad, y la recuperación, aunque lenta, ha sido positiva. Bolsonaro fue trasladado el miércoles pasado a la sección de hospitalización, y este domingo, con una sonrisa y caminando, abandonó la clínica DF Star en medio de un recibimiento caluroso por parte de sus seguidores.

A través de sus redes sociales, Bolsonaro expresó su gratitud y esperanza. Horas antes de su alta, escribió en X (anteriormente Twitter): “Gracias, Dios mío, por ese milagro”, dejando ver su fe y optimismo frente a su recuperación.

Acompañado por un grupo de simpatizantes, Bolsonaro salió caminando sin aparentes complicaciones, demostrando que su estado de salud ha mejorado significativamente.

Este suceso coincide con un momento complejo en la política brasileña. A finales de marzo, el Supremo Tribunal Federal decidió abrir un proceso judicial contra Bolsonaro por un presunto intento de golpe de Estado al final de su mandato, en 2022.

La fiscalía lo acusa de haber liderado un complot para impedir la asunción del actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva, tras ganar las elecciones en ese año.

Este juicio representa un hito en la historia política de Brasil, ya que es el primer proceso contra un expresidente por actividades relacionadas con intentos golpistas desde la dictadura militar que gobernó el país entre 1964 y 1985.

La polémica y los debates sobre la estabilidad democrática en Brasil siguen en auge, mientras Bolsonaro se recupera y mantiene su influencia en el escenario político.

En términos de costo, la cirugía y hospitalización de Bolsonaro en Brasilia se estima en aproximadamente 150,000 reales brasileños, equivalentes a unos 25,000 euros, considerando gastos médicos y cuidados intensivos.

La atención médica en Brasil, especialmente en clínicas privadas de alta categoría, suele tener un coste elevado, pero en comparación con otros países, resulta relativamente accesible para las clases altas y figuras públicas.

El exmandatario, que en su mandato (2019-2022) promovió reformas económicas y políticas conservadoras, continúa siendo una figura central en la política brasileña.

Su recuperación y su postura ante las recientes decisiones judiciales serán determinantes para su futuro político y para el rumbo del país en los próximos años.

La atención mediática y la opinión pública están atentos a su estado de salud y a su posible retorno a la escena pública en un momento en que Brasil vive tensiones y cambios importantes en su historia reciente.