En Budapest, Hungría, el Primer Ministro Viktor Orbán reafirmó el compromiso de su país con la defensa nacional durante una entrevista en la radio estatal.

Esta declaración se produce tras la controversia generada por las declaraciones de su asesor político, Balázs Orbán, quien suscitó el descontento al sugerir que Hungría no habría combatido contra una posible invasión rusa, a diferencia de Ucrania.

Durante la entrevista, Orbán se vio obligado a aclarar los comentarios de su director político, los cuales provocaron una ola de indignación entre la población húngara y llevaron a numerosos sectores a exigir su renuncia.

Balázs Orbán, quien no es pariente del Primer Ministro, había afirmado en un pódcast que el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, había tomado una decisión "irresponsable" al optar por defender su nación militarmente tras la invasión masiva de Moscú en febrero de 2022. Aseguró que Hungría había aprendido la importancia de proteger "vidas húngaras valiosas" en lugar de sacrificarlas en un conflicto.

Viktor Orbán calificó los comentarios de su asesor como "una declaración ambigua que, en este contexto, es un error". Hizo hincapié en que Hungría siempre ha defendido su territorio y lo hará utilizando todos los medios a su disposición, dejando claro que la seguridad nacional es una prioridad.

Desde el inicio del conflicto, fruto de la invasión rusa a Ucrania, Hungría ha adoptado una postura de cautela, buscando limitar o ralentizar las iniciativas de la Unión Europea para proporcionar apoyo financiero y militar a Kiev, así como para implementar sanciones contra Moscú. Esta actitud ha generado críticas de diversos líderes europeos, quienes acusan a Hungría de intentar dividir la UE y promover los intereses rusos.

Las declaraciones de Balázs Orbán también suscitaron reacciones negativas al recordarle a muchos húngaros la resistencia de su país durante la ocupación soviética en 1956. En aquel entonces, miles de húngaros se levantaron contra el régimen comunista, un acto de valentía que tuvo un alto costo en vidas humanas.

Muchos consideraron que los comentarios de Balázs eran un desaire a la memoria de aquellos que lucharon por la libertad.

Es importante recordar que la historia de Hungría está marcada por una serie de ocupaciones y conflictos, donde la defensa de la soberanía ha sido un tema recurrente.

Desde la guerra de independencia en 1848 contra el Imperio Austrohúngaro, hasta la Revolución de 1956 mencionada, cada episodio resalta la importancia de la autodefensa en la identidad nacional húngara.

A medida que la guerra en Ucrania continúa, el dilema sobre el apoyo militar y las alianzas geopolíticas se vuelve cada vez más complejo.

La situación actual plantea interrogantes sobre la dirección futura de Hungría y su equilibrio en el marco de la relación con las potencias vecinas y la comunidad europea.