Una reciente serie de bombardeos en Gaza y Líbano ha dejado un saldo devastador, mientras se esperan avances en las negociaciones para un alto el fuego.
El conflicto entre Israel y Hamas continúa agravándose, con un reciente bombardeo que cobró la vida de al menos 18 personas, todas de la misma familia, en Gaza.
Este ataque se suma a otro ocurrido en Líbano, donde 10 personas perdieron la vida, lo que resalta un periodo crítico en la región, justo cuando mediadores de Estados Unidos, Egipto y Qatar expresaban optimismo sobre la posibilidad de un acuerdo para un alto el fuego.
Los ataques aéreos del sábado tuvieron lugar después de que las negociaciones, que duraron dos días en un esfuerzo por avanzar hacia un cese de hostilidades que ha perpetuado un estado de guerra durante 10 meses, ofrecieron una nueva propuesta para cerrar las brechas existentes.
Los detalles de implementación se discutirán la próxima semana en El Cairo.
La situación en Gaza es alarmante.
Las autoridades locales han reportado que el número de muertos ha superado las 40,000 personas, y hay temores de un posible brote de polio, lo que subraya la magnitud de la crisis humanitaria.
Los esfuerzos de mediación no solo buscan liberar a numerosos rehenes israelíes, sino también detener los bombardeos que han devastado la infraestructura de Gaza.
El ataque del sábado golpeó una vivienda y un almacén en el centro de Gaza, donde se refugiaban desplazados en Zawaida, según informes del hospital al-Aqsa en Deir al-Balah.
En este lugar, un periodista de Associated Press contabilizó las víctimas.
Entre los fallecidos se encontraba Sami Jawad al-Ejlah, un comerciante que había coordinado con el ejército israelí para el suministro de carne y pescado a la franja.
También perdieron la vida sus dos esposas, 11 de sus hijos, un pariente y la abuela de los niños.
Un vecino describió a al-Ejlah como un hombre pacífico que había tratado de ayudar a su comunidad.
Más de 40 civiles se encontraban resguardados en el inmueble y el almacén en el momento del ataque.
La respuesta del ejército israelí, que raramente comenta sobre casos individuales de bombardeos, justificó la acción diciendo que se trató de una operación contra “infraestructura terrorista” en Gaza, que había sido utilizada para lanzar cohetes hacia su territorio.
Además, reiteraron que continuarán los ataques contra los militantes y han ordenado evacuaciones masivas en áreas centrales de Gaza.
De acuerdo con la ONU, la gran mayoría de la población de Gaza se ha visto obligada a dejar sus hogares, destacando que aproximadamente el 84% del territorio está bajo órdenes de evacuación.
La historia reciente de este conflicto es trágica y extensa, marcada por ciclos de violencia y esfuerzos de paz que muchas veces han resultado infructuosos.
El papel de actores regionales como Irán y Hezbollah sigue siendo un factor de tensión creciente, amenazando con extender el conflicto más allá de las fronteras de Gaza.