Al menos 24 personas fallecieron y más de 300 resultaron heridas en un ataque con ametralladora del Ejército israelí en Gaza. La situación se agrava por las dificultades en la entrada de ayuda humanitaria y la creciente violencia en la región.

Según informaron fuentes médicas del hospital de Al Shifa, al menos 24 personas perdieron la vida y más de 300 resultaron heridas por disparos de ametralladora cerca del puesto militar de Zikim, situado al noroeste de la ciudad de Beit Lahia.
La zona, que forma parte de la Franja de Gaza, ha sido escenario de continuos enfrentamientos en los últimos años, pero este incidente ha causado conmoción internacional por su gravedad.
Supuestamente, durante toda la jornada de ayer, solo siete camiones lograron ingresar por el norte, atravesando Zikim, aunque todos ellos fueron confiscados por las fuerzas israelíes, según informaron fuentes locales a la agencia EFE.
La Fundación Humanitaria para #Gaza (GHF, por sus siglas en inglés), que ha sido objeto de controversia por su modo de distribución de ayuda, no tiene puntos de reparto en el norte de Gaza y los residentes dependen en gran medida de los pocos camiones de la ONU que logran obtener permisos israelíes, tras largos procesos burocráticos.
La situación humanitaria en Gaza se ha deteriorado aún más
En los últimos días, la situación humanitaria en Gaza se ha deteriorado aún más. Equipos de rescate han recuperado los cuerpos de otros tres gazatíes, presuntamente asesinados en los últimos dos días por disparos israelíes mientras buscaban alimentos o recursos básicos para sobrevivir.
La crisis alimentaria y de abastecimiento de agua potable se ha intensificado, con miles de residentes enfrentando condiciones extremas, en un contexto donde la infraestructura sanitaria y de servicios básicos ha sido severamente afectada.
Mirjana Spoljaric, presidenta del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), expresó en un comunicado su profunda preocupación por la situación.