En Quito, la capital de Ecuador, la policía informa que los seis sospechosos arrestados por el asesinato del candidato presidencial ecuatoriano Fernando Villavicencio son ciudadanos colombianos con vínculos con el crimen organizado.

Este asesinato, que ocurrió el miércoles por la noche, ha causado conmoción en el país sudamericano, llevando a algunos rivales a suspender sus campañas y poniendo la cuestión de la creciente violencia en primer plano.

Fernando Villavicencio, un crítico vocal de la corrupción y el crimen organizado, fue asesinado mientras salía de un evento de campaña en una instalación educativa en el norte de Quito.

Un sospechoso murió a causa de las heridas sufridas en un tiroteo, según la fiscalía.

Además, nueve personas, incluido un candidato a la legislatura y dos policías, resultaron heridas.

Según el gobierno, el sospechoso muerto había sido arrestado por cargos de posesión de armas en julio, y los seis hombres detenidos pertenecían a grupos criminales organizados.

El Ministro del Interior, Juan Zapata, dijo a los periodistas: 'La policía nacional ahora tiene los primeros arrestos de los presuntos autores materiales de este abominable evento y empleará toda su capacidad operativa e investigativa para descubrir el motivo de este crimen y sus autores intelectuales'.

La participación de ciudadanos colombianos en el asesinato recuerda al asesinato del entonces presidente de Haití, Jovenel Moise, en 2021, quien fue asesinado en su casa por un grupo que incluía a 26 colombianos y dos haitiano-estadounidenses.

El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, dijo que el crimen fue claramente un intento de sabotear las elecciones, pero que la votación seguirá adelante según lo planeado el 20 de agosto, aunque en estado de emergencia nacional.