Washington: Donald Trump ha intensificado sus ataques contra los inmigrantes, prometiendo que, en caso de ser electo, implementará un programa masivo de deportación que comenzaría en Springfield, Ohio.

Esta ciudad del medio oeste ha sido el centro de afirmaciones desacreditadas acerca del consumo de mascotas por parte de haitianos.

Días después de que el ex presidente de EE.UU. amplificara estas controvertidas afirmaciones durante un debate con la vicepresidenta Kamala Harris, una amenaza de bomba obligó a evacuar el ayuntamiento de Springfield, así como escuelas y otros edificios.

Ante esta situación, el presidente Joe Biden declaró: “Esto tiene que parar”.

Trump se dirigió a los medios en una conferencia de prensa el viernes en su campo de golf en Rancho Palos Verdes, California.

Su retórica ha generado una serie de reacciones, incluidas las del Papa Francisco, quien también ha participado en el debate sobre la política electoral.

Cuando se le preguntó sobre cómo debían votar los católicos estadounidenses en las elecciones del 5 de noviembre, el Pontífice tocó dos temas candentes: la migración y el aborto.

Francisco afirmó que ambos candidatos eran “contrarios a la vida”, ya sea quien expulsa a los inmigrantes o quien práctica el aborto.

El Papa destacó que la migración es un derecho mencionado en las Escrituras y que aquellos que ignoran el llamado bíblico de acoger al extraño están cometiendo un “grave pecado”. Aun más contundente fue su comentario sobre el aborto: “Tener un aborto es matar a un ser humano.

Te puede gustar la palabra o no, pero es matar”, expresó. “Debemos verlo claramente”.

Francisco instó a los votantes a ejercer su deber cívico: “Uno debe votar, y elegir el mal menor”, dijo.

“¿Quién es el mal menor: la mujer o el hombre? No lo sé”.

A pesar de las críticas y los comentarios sobre su campaña, Trump continuó afirmando en su conferencia de prensa que “la verdadera amenaza es lo que está ocurriendo en nuestra frontera”. Sus recientes publicaciones en redes sociales, que incluyen memes de gatos y perros, han sido objeto de burla entre sus detractores, quienes lo acusan de trivializar asuntos serios.

A lo largo de la historia, la retórica antimigrante ha sido un tema recurrente en la política de Estados Unidos, especialmente en tiempos de elecciones.

La llegada de inmigrantes ha estado ligada a debates sobre la identidad nacional, la economía y la seguridad.

De hecho, durante períodos críticos de la historia estadounidense, como la Gran Depresión o tras los ataques del 11 de septiembre, el discurso sobre la inmigración cambió dramáticamente, reflejando los miedos y desafíos de la sociedad.

La intervención del Papa en este contexto electoral subraya la importancia del debate moral en torno a la migración y los derechos humanos, un tema que sigue siendo relevante a medida que las elecciones se acercan.

Mientras el país se prepara para decidir su futuro, la cuestión de cómo se tratará a los inmigrantes continúa siendo un punto focal de controversia.