En una jornada histórica dentro de la majestuosa Abadía de Westminster, famosa por ser el lugar de coronación de grandes figuras como Guillermo el Conquistador en 1066, el Coro del Colegio San Pablo de Sídney, Australia, ofreció una interpretación de la canción navideña australiana 'Carol of the Birds'. Este evento, que tuvo lugar en el último día del año, resonó entre las tumbas de reyes, reinas y sinfín de personajes ilustres como Isaac Newton y Charles Darwin.

El director artístico del coro, Jack Stephens, expresó que la interpretación marcó una referencia única en el recinto, al afirmar que probablemente era la primera vez que se mencionaban términos como 'currawong' y 'lorikeet' dentro de la abadía.

Esta actuación se enmarca en una gira europea del coro, que busca expandir su repertorio cultural y compartir las tradiciones musicales australianas.

Compuesta en 1948 por William James, con letras de John Wheeler, 'Carol of the Birds' ha sido un clásico en las escuelas primarias de Australia, en un marcado contraste con las canciones navideñas tradicionales europeas que evocan paisajes invernales con frío y nieve.

El coro, al interpretar esta melodía, trae consigo la imagen de aves autóctonas danzando, capturando así la esencia del verano australiano en comparación con el invierno del hemisferio norte.

El estribillo de la canción, que repite 'Orana! Orana! Orana a Navidad', toma su inspiración de una palabra del idioma Wiradjuri que significa 'bienvenido'. Según Stephens, este particular enfoque es significativo para el coro, que desea celebrar no solo la Navidad, sino también la diversidad cultural y lingüística de Australia.

“Frecuentemente interpretamos villancicos navideños que describen inviernos helados.

Sin embargo, este es un villancico verdaderamente australiano, que celebra la festividad utilizando la fauna y la flora de nuestro entorno.

Incorporar una palabra indígena como 'orana' le añade una rica dimensión cultural a la celebración”, agregó el director de música.

La Abadía de Westminster, un lugar emblemático de la cultura británica y la historia del Reino Unido, ha sido testigo de muchos momentos significativos, desde coronaciones hasta funerales de estado.

La música ha jugado un papel fundamental en estas solemnidades, y la actuación del coro australiano representa un diálogo cultural que trasciende el tiempo y el espacio.

Con la llegada del Coro del Colegio San Pablo a este icónico lugar, la música australiana encontró una nueva audiencia, reforzando los lazos entre culturas, y ofreciendo un recordatorio de que la Navidad se celebra en diversas formas y significados alrededor del mundo.

En la misma abadía donde se rindió homenaje a la Reina Isabel II hace apenas dos años, el eco de un villancico australiano resuena, uniendo tradiciones en una celebración global de la festividad.