Una llamada telefónica falsa al 911 alertó sobre un incendio en la Casa Blanca, generando una rápida respuesta de vehículos de emergencia. Este incidente de 'swatting' llega al centro de poder de Estados Unidos mientras afecta a figuras políticas americanas.
En una falsa llamada al 911, se informó que la Casa Blanca estaba en llamas y que había una persona atrapada dentro, lo que generó una urgente respuesta de vehículos de emergencia.
Este incidente de 'swatting' que ha afectado a varias figuras políticas americanas, ahora llega al centro de poder de Estados Unidos.
El presidente estadounidense, Joe Biden, y su familia se encontraban fuera de la Casa Blanca cuando ocurrió esta situación. Según una fuente cercana al asunto, los bomberos y los servicios médicos de emergencia del Distrito de Columbia, junto con el Servicio Secreto de Estados Unidos, determinaron en cuestión de minutos que se trataba de un informe falso y cancelaron la respuesta.
La persona que fue contactada en el número de devolución de la llamada al 911 indicó que ellos no la realizaron, lo que indica que probablemente fue falsificada.
Exasesor de la Casa Blanca asegura que Mark Meadows quemaba documentos después de las elecciones de 2020
Un exasesor de la Casa Blanca revela que el entonces jefe de gabinete, Mark Meadows, quemaba documentos con tanta frecuencia después de las elecciones de 2020 que dejaba su oficina llena de humo, llegando incluso a quejarse su esposa de que sus trajes olían 'como una hoguera'. Cassidy Hutchinson, quien fue una importante testigo ante el comité del 6 de enero de la Cámara, describe la quema de documentos en su nuevo libro 'Enough', que será lanzado el martes. La agencia Associated Press obtuvo una copia del libro.La familia Biden se encontraba en el retiro presidencial Camp David, en Maryland, y tenía previsto regresar a la Casa Blanca más tarde en el día después de participar en un evento conmemorativo en Filadelfia por el Día de Martin Luther King.
En los últimos meses, las figuras políticas americanas han sido víctimas de una ola de falsas llamadas de emergencia. La semana pasada, el juez de Nueva York a cargo de un juicio por fraude multimillonario contra el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió una amenaza de bomba horas antes de que comenzaran los argumentos finales en el caso.