Las autoridades rusas capturaron a los cuatro hombres sospechosos de llevar a cabo el ataque en un concierto en las afueras de Moscú que dejó al menos 133 personas muertas, según informó el presidente Vladimir Putin durante un discurso a la nación.

En un nuevo incidente de violencia en Europa, las autoridades rusas lograron detener a los cuatro hombres que se cree llevaron a cabo el ataque en un concierto de las afueras de Moscú que terminó con la trágica muerte de al menos 133 personas, según informó el presidente Vladimir Putin durante un discurso a la nación.

Putin afirmó que los sospechosos fueron capturados mientras intentaban huir hacia Ucrania.

Kyiv negó rotundamente cualquier participación en el ataque al recinto musical Crocus City Hall en Krasnogorsk, mientras que el afiliado del Estado Islámico en Afganistán, ISIS-K, se atribuyó la responsabilidad.

Putin no mencionó al Estado Islámico en su discurso, y Kyiv lo acusó a él y a otros políticos rusos de vincular falsamente a Ucrania con el asalto para avivar el fervor en la guerra de Rusia en Ucrania, que recientemente ha entrado en su tercer año.

Un funcionario de inteligencia de EE. UU. dijo que las agencias estadounidenses confirmaron que el Estado Islámico fue responsable del asalto y que previamente habían advertido a Moscú sobre la inminencia de un ataque.

Putin dijo que las autoridades han detenido a 11 personas en relación con el ataque, que también dejó heridos a decenas de asistentes al concierto y convirtió el lugar en una ruina humeante.

Lo calificó como "un acto terrorista sangriento y bárbaro" y afirmó que las autoridades rusas capturaron a los cuatro presuntos pistoleros cuando intentaban escapar hacia Ucrania a través de una "ventana" preparada para ellos en el lado ucraniano de la frontera.

Putin también anunció que se han implementado medidas de seguridad adicionales en toda Rusia, y declaró el domingo como día de luto.

El ataque, el más mortífero en Rusia en años, es un gran motivo de vergüenza para el líder ruso y ocurrió solo días después de que afianzara su control sobre el país por otros seis años en una votación que siguió a la represión más dura a la disidencia desde la época soviética.

Algunos comentaristas en las redes sociales rusas cuestionaron cómo las autoridades, que han reprimido implacablemente cualquier actividad opositora y amordazado a los medios de comunicación independientes, no pudieron prevenir el ataque a pesar de las advertencias de EE. UU.

Convertimos los precios a Euros:

- 133 personas muertas

- 11 detenidos

El atentado en Moscú conmueve a Europa una vez más, y pone de manifiesto la fragilidad de la seguridad en la región.

Las autoridades rusas trabajarán para esclarecer completamente lo sucedido y llevar a los responsables ante la justicia.