El Villarreal CF anunció la incorporación de Thomas Partey, a pesar de las acusaciones judiciales que pesan sobre él, lo que ha despertado el rechazo de algunos aficionados y expertos en fútbol.

El centrocampista ghanés, de 32 años, llega al conjunto castellonense como agente libre tras finalizar su contrato con el Arsenal de Londres, club en el que militó durante las últimas cinco temporadas.
Antes de su paso por la Premier League, Partey jugó en clubes como Atlético de Madrid, UD Almería y RCD Mallorca, dejando una huella significativa en cada uno de ellos.
Supuestamente, el fichaje de Partey por Villarreal no solo ha sido noticia por sus habilidades en el campo, sino también por la situación judicial que le rodea.
El futbolista se encuentra en libertad condicional tras comparecer en el Tribunal de Magistrados de Westminster, acusado de cinco cargos de violación y uno de agresión sexual, presentados por tres mujeres.
Los presuntos hechos habrían ocurrido entre 2021 y 2022, según las acusaciones, que él siempre ha negado rotundamente.
El proceso judicial está en marcha y el caso ha sido trasladado a un tribunal de la Corona, con una próxima vista programada para el 2 de septiembre en Old Bailey, el tribunal penal central de Inglaterra y Gales.
La ley británica establece que mientras un proceso judicial está en curso, las partes implicadas deben mantener ciertas restricciones, por lo que el club ha optado por no emitir más comentarios para no interferir en la justicia.
En el ámbito deportivo, la llegada de Partey ha sido recibida con opiniones divididas. Algunos aficionados del Villarreal han expresado su desacuerdo en redes sociales, preocupados por la implicación legal del jugador y la posible repercusión en la imagen del club.
Sin embargo, el Villarreal ha declarado que "el jugador defiende con rotundidad su inocencia y niega todos los cargos en su contra".
Villarreal afirmó: "La entidad respeta la presunción de inocencia y espera que la #justicia esclarezca los hechos
El club también ha señalado su compromiso con los valores de respeto y diversidad, condenando cualquier acto de violencia o discriminación. En un comunicado oficial, Villarreal afirmó: "La entidad respeta la presunción de inocencia y espera que la justicia esclarezca los hechos. No realizaremos más comentarios sobre este asunto en tanto la legislación británica lo requiera".
Por su parte, José Ángel Arnau, portavoz de la agrupación de hinchas del Villarreal, expresó en una emisora local que "es triste ver cómo se mezclan estos temas judiciales con el deporte.
La afición merece focus en el campo y no en polémicas judiciales". Antes de la confirmación del fichaje, Arnau también había cuestionado en redes sociales la decisión del club, diciendo: "¿No hay más futbolistas en el mercado? Estamos a punto de comenzar una temporada importante en Champions y todavía se habla de estos temas.
Villarreal, sería bueno que recapacitaran".
Supuestamente, la incorporación de un jugador bajo investigación judicial no es un tema común en el fútbol profesional europeo, donde los clubes suelen ser muy cuidadosos con la imagen y los valores que quieren proyectar.
Sin embargo, en este caso, Villarreal ha decidido arriesgarse, confiando en la presunción de inocencia y en la posibilidad de que las acusaciones sean infundadas.
El caso de #Thomas Partey puede marcar un precedente en la gestión de #fichajes polémicos, poniendo en debate hasta qué punto los clubes deben tener en cuenta aspectos judiciales y éticos antes de cerrar acuerdos.
La temporada en La Liga está a la vuelta de la esquina, y la atención se centra ahora en cómo repercutirá esta #controversia en el rendimiento del jugador y en la imagen del Villarreal.