La nueva liga de fútbol femenino en Canadá abre la preventa de abonos anticipados para sus aficionados, marcando un importante avance en el desarrollo de este deporte.
La Northern Super League (NSL), una nueva liga profesional de fútbol femenino en Canadá, ha comenzado la venta de abonos anticipados para la temporada inaugural que comenzará en abril de 2025. Desde este jueves, los seis clubes que forman parte de la liga están aceptando depósitos de 50 dólares canadienses (aproximadamente 34 euros) por asiento para asegurar una prioridad en la selección de lugares, la cual se llevará a cabo en octubre.
Esta iniciativa busca no solo atraer a los aficionados, sino también establecer una base sólida para el crecimiento a largo plazo de la liga.
Christina Litz, presidenta de la liga, describió esta campaña como un "paso muy importante en nuestra evolución como comunidad de aficionados". En declaraciones a la prensa, Litz expresó su entusiasmo por la respuesta del público y destacó que, a pesar de la emoción que rodea al lanzamiento de la liga, es crucial mantener una perspectiva a largo plazo.
"Estamos aquí para quedarnos y construir algo significativo en el ámbito del fútbol femenino en Canadá", afirmó.
El depósito de 50 CAD no se reembolsará, pero si el aficionado decide no adquirir un abono, podrá utilizar el importe como crédito para la compra de boletos individuales u otros paquetes que se ofrezcan.
Esto es parte del esfuerzo de la liga por crear un ambiente positivo y accesible para sus seguidores.
La NSL contará con clubs como Vancouver Rise FC, Calgary Wild FC, AFC Toronto, Ottawa Rapid FC, Halifax Tides FC y una franquicia de Montreal, que todavía no ha revelado su nombre completo.
Cada equipo jugará 12 o 13 partidos como local durante la primera temporada.
Halifax ha sido el primero en abrir la opción de depósitos, lo que ha generado indicios alentadores sobre la receptividad del mercado.
"Si la situación en Halifax es un indicador del entusiasmo, definitivamente hay un interés significativo", explicó Litz.
Sin embargo, también es consciente de los desafíos que presenta la venta de entradas en el actual panorama deportivo, donde la competencia por la atención y el presupuesto de los aficionados es feroz.
La liga tiene un tope salarial inicial de 1.6 millones de dólares canadienses (alrededor de 1.08 millones de euros) por equipo, lo que representa un aumento sobre el inicialmente propuesto 1.5 millones.
Este tope cubrirá plantillas de entre 20 y 25 jugadores y se sumará un límite adicional para beneficios como alojamiento y transporte.
Los franquiciantes podrán contar con un máximo de siete jugadoras extranjeras, además de una jugadora estrella cuyo salario no se contabilizará dentro del límite salarial.
Los partidos se llevarán a cabo en varios estadios emblemáticos, incluyendo el York Lions Stadium para el AFC Toronto y el TD Place para el Ottawa Rapid FC. El futuro de la NSL depende en gran medida de la respuesta de los aficionados y la capacidad de los equipos para ofrecer experiencias atractivas.
Con un enfoque en el desarrollo del fútbol femenino, la NSL promete ser un hito en el deporte canadiense y un paso afirmativo hacia un futuro más equitativo para las atletas mujeres.
La NSL representa la culminación de esfuerzos continuos para impulsar el fútbol femenino en Canadá. Desde el anuncio de su creación, figuras destacadas como Diana Matheson, cofundadora de la liga y exjugadora de la selección nacional, han estado a la vanguardia de esta iniciativa.
Con la creciente cobertura mediática, un reciente acuerdo de transmisión con CBC/Radio-Canada y un enfoque renovado hacia los aficionados, el horizonte se ve claramente prometedor para el fútbol nacional femenino.