Las farmacias en Euskadi han registrado una notable disminución en la realización de pruebas rápidas de VIH en los últimos años. Las autoridades sanitarias destacan la importancia de la prevención y el diagnóstico temprano para mejorar la calidad de vida de las personas afectadas, promoviendo el papel fundamental de las farmacias en esta labor.

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En la región del País Vasco, se ha evidenciado un descenso significativo en la cantidad de pruebas rápidas de VIH realizadas en farmacias. Entre los años 2015 y 2019, se llevaron a cabo aproximadamente 12.400 tests, mientras que en el período comprendido entre 2019 y 2024, la cifra cayó a unos 5.100. Esta disminución abrupta está relacionada principalmente con la pandemia mundial de COVID-19, que afectó la actividad de muchos servicios de salud, incluyendo las campañas de prevención y diagnóstico del VIH.

Según datos del Departamento de Salud, Osakidetza y el Consejo de Farmacéuticos del País Vasco, la importancia de la prevención y la detección temprana es vital para mejorar la calidad de vida de las personas con VIH.

Ambos organismos recordaron públicamente que disponer de recursos de diagnóstico accesibles ayuda a reducir el estigma y favorece que las personas puedan detectar la infección de manera confidencial y rápida.

Las farmacias en Euskadi han jugado un papel crucial en la estrategia de salud pública para el control del VIH. Actualmente, hay una red de 60 farmacias autorizadas para realizar estas pruebas rápidas, distribuidas en las provincias de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

En 2024, se realizaron aproximadamente 1.010 pruebas en estos establecimientos, siendo la mayoría en Bizkaia (alrededor del 50%), seguida por Gipuzkoa (31%) y Araba (16%). La prueba proporciona un resultado en unos 20 minutos y detecta la presencia de anticuerpos y/o antígeno del VIH.

El perfil típico de los usuarios que acuden a estas pruebas es mayormente masculino, con un promedio de edad de 41 años, y un notable porcentaje (41,9%) que son hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres.

De todas las pruebas realizadas, solo en el 0,8% se obtuvo un resultado positivo, cifra que refleja la importancia de las campañas de diagnóstico precoz.

La única manera de confirmar si una persona tiene VIH es mediante una prueba específica, que puede ser realizada en centros sanitarios de Osakidetza o en farmacias colaboradoras.

Las mejoras en la accesibilidad, la confidencialidad y la rapidez facilitan que más personas puedan acceder a la detección, contribuyendo a reducir posibles transmisiones.

Desde las instituciones sanitarias subrayan que realizar estas pruebas en farmacias mejora no solo la accesibilidad, sino también ayuda a mitigar el estigma social asociado al VIH.

El director de Farmacia del Gobierno Vasco, Iñaki Betolaza, expresó su reconocimiento a los farmacéuticos por su colaboración constante durante los últimos 15 años en la detección del virus mediante un convenio conjunto.

Expertos en salud pública coinciden en que un diagnóstico precoz es crucial para gestionar eficazmente la enfermedad. Oskar Ayerdi, coordinador del Plan del SIDA e ITS de Osakidetza, destacó que las farmacias representan un lugar idóneo no solo por su cercanía a la comunidad, sino también por la posibilidad de realizar pruebas de manera anónima.

Por su parte, Miguel Ángel Gastelurrutia, presidente del Consejo de Farmacéuticos del País Vasco, enfatizó en la importancia de detectar el VIH lo antes posible.

Aunque hoy en día el VIH ha pasado a considerarse una enfermedad crónica controlable, sigue siendo una infección de transmisión sexual que requiere medidas preventivas como el uso del preservativo.

Con el fin de potenciar las acciones de prevención, esta semana se llevó a cabo una jornada de trabajo con la red de farmacias implicadas. En dicha reunión, se presentaron nuevas campañas informativas para la población, incluyendo carteles y folletos explicativos sobre cómo realizarse la prueba y qué pasos seguir en caso de un resultado positivo.

Además de las estrategias preventivas tradicionales, se están promoviendo medicamentos como la profilaxis pre y post-exposición (PrEP), que reduce significativamente el riesgo de contraer VIH en personas con alto riesgo de exposición.

En lo que respecta a los tratamientos, aunque aún no existe una cura definitiva, los medicamentos antirretrovirales actuales permiten que las personas con VIH supriman la carga viral a niveles indetectables, lo que es equivalente a inmunidad intransmisible.

Gracias a estos avances, la esperanza de vida para las personas afectadas ha aumentado considerablemente.

El Departamento de Salud y Osakidetza continúan comprometidos con la lucha contra el VIH y las infecciones de transmisión sexual, fortaleciendo sus programas de diagnóstico precoz, prevención y educación.

La creación de un responsable específico para Sida e ITS en su estructura refleja su apuesta por un enfoque integral y proactivo para controlar y reducir la incidencia de estas infecciones en Euskadi.

Más información sobre las estrategias y recursos disponibles puede consultarse en Osasun Eskola Plus a través de su plataforma online, donde también se divulgan campañas y materiales informativos actualizados y accesibles para toda la población.