Euskadi ha experimentado en diciembre un notable incremento en las lluvias y las temperaturas, según la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet.
Durante el pasado mes de diciembre de 2024, Euskadi vivió un clima inusualmente húmedo y cálido, según los informes de la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet.
En diversas zonas de la comunidad, se registró un índice de precipitaciones que supera el 50 % por encima de la media histórica, con la excepción de las comarcas costeras, que experimentaron condiciones relativamente más secas.
En particular, la Llanada Alavesa reportó una temperatura media de 6 °C, que representa una anomalía de aproximadamente 0.8 °C más alta de lo que se esperaría normalmente para este periodo del año.
A este aumento en las temperaturas se le suma el hecho de que las lluvias acumuladas durante diciembre alcanzaron cifras sorprendentes.
En el nordeste de Gipuzkoa, por ejemplo, algunos puntos como Eskas registraron 438.4 l/m², seguido de Berastegi con 390.2 l/m² y Ameraun con 381.9 l/m². Otros lugares destacados en cuanto a precipitaciones fueron Bidania con 372.7 l/m² y Añarbe con 387.8 l/m².
Sin embargo, a medida que nos alejamos de la costa y nos dirigimos hacia el eje del Ebro, las cifras de precipitaciones disminuyen drásticamente.
Por ejemplo, localidades como Zambrana y Moreda recibieron solo 57 l/m² y 61.7 l/m², respectivamente.
Igualmente, en zonas de la Llanada Alavesa como Espejo y Alegría, las precipitaciones fueron igualmente limitadas, con valores de 86.7 l/m² y 99.1 l/m².
En consonancia con las condiciones descritas, el número de días con precipitaciones fue superior al promedio climatológico.
Durante el mes, la costa experimentó temperaturas que variaron entre 10 y 11 °C, mientras que en los valles cantábricos estas fluctuaron entre 8 y 9 °C. A lo largo del siglo XXI, estos índices son normales, aunque se sitúan 2 °C por debajo de los meses de diciembre más cálidos registrados en años recientes, como 2015 y 2022.
Asimismo, el mes se caracterizó por tener una insolación ligeramente mayor a la media, exceptuando el litoral oriental, donde el sol brilló menos.
Las horas de sol registradas por las capitales fueron más que considerables, con 82 horas en Bilbao, 86 en Donostia-San Sebastián y 84 en Vitoria-Gasteiz.
No obstante, a partir del día 27, se produjeron varias jornadas soleadas, aunque no sin inconvenientes, ya que la presencia de brumas costeras y niebla persistente obstaculizó la visibilidad en ciertas áreas.
Desde el punto de vista de la meteorología extrema, el Gobierno Vasco emitió en diciembre un total de 4 alertas naranjas, dos de ellas relacionadas con lluvias persistentes y otras dos por la altura de las olas para navegación.
Además, se llevaron a cabo 28 avisos amarillos por diversas razones, incluidas precipitaciones persistentes, nieve y viento en zonas expuestas.
En resumen, el diciembre de 2024 en Euskadi será recordado no solo por el volumen de agua que cayó, sino también por el clima cálido que caracterizó a la región, sumándose a la tendencia global de cambios climáticos visibles en diversas partes del mundo.