El gobierno vasco destina más de 32 millones de euros a planes de empleo, priorizando la inclusión laboral de los colectivos más vulnerables.

El Vicelehendakari Mikel Torres ha subrayado el compromiso del Departamento de Economía, Trabajo y Empleo en Euskadi, que se enfoca en potenciar la inclusión en el mercado laboral de aquellos grupos que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad.

La meta principal es promover políticas que aseguren empleos de calidad, donde los trabajadores reciban remuneraciones justas y gocen de condiciones laborales óptimas.

En el año 2024, el Servicio Vasco de Empleo, conocido como Lanbide, ha destinado más de 32 millones de euros (aproximadamente 27 millones de euros) a planes de empleo que benefician a diversas entidades locales de la región.

Esta significativa inversión ha permitido llevar a cabo un total de 2.489 contrataciones, de las cuales 1.674 se han realizado directamente a través de estas entidades locales.

Un ejemplo claro de esta iniciativa se encuentra en el Ayuntamiento de Abanto Zierbena, el cual ha recibido cerca de 513.000 euros (cerca de 430.000 euros) en subvenciones.

Estos fondos han hecho posible la incorporación de 33 personas a través de tres proyectos distintos en el municipio, lo que refuerza el papel proactivo de la administración local en la creación de empleo.

Durante la presentación del plan de empleo en Abanto Zierbena, Torres enfatizó la importancia de facilitar la inclusión laboral de sectores más desfavorecidos, así como la necesidad de incentivar la actividad económica en el territorio.

Además, destacó que la Ley Vasca de Empleo prevé nuevas formas de colaboración con las entidades locales, las cuales son esenciales en la Red Vasca de Empleo, y que se implementarán en los próximos años.

La nueva legislación también se centra en ampliar los derechos de la ciudadanía, garantizando que toda persona reciba un apoyo personalizado a través de Lanbide.

Con esta medida, se busca asegurar que el acceso a empleo o la posibilidad de aspirar a mejores oportunidades laborales no esté condicionado por la situación económica de cada individuo.

En un horizonte de seis años, se prevé la actualización y aprobación de la Estrategia Vasca de Empleo, la cual alineará las políticas y programas de empleo de todas las entidades que forman parte de la Red Vasca.

Según Torres, esta estrategia será fruto de un proceso participativo y consensuado con los principales actores del sistema laboral en Euskadi.

Una vez implementada, la estrategia permitirá diseñar planes trienales de empleo que incluyen iniciativas promovidas por diversas entidades locales, como ayuntamientos y diputaciones.

Hacia la segunda mitad del año, se espera que se fomente la elaboración de planes locales orientados hacia el desarrollo económico y empleo, lo que permitirá abordar diagnósticos específicos y establecer acciones concretas para cada realidad local.

Este enfoque apunta no solo a generar empleo, sino también a consolidar un sistema que respete los derechos laborales y promueva el bienestar social, asegurando así un futuro más prometedor para todos los ciudadanos vascos.