El Lehendakari Imanol Pradales destaca los avances del modelo cooperativo vasco y la importancia de fortalecer la economía social mediante iniciativas como ASETT, en un contexto de reconocimiento y colaboración internacional.
En el País Vasco, el Lehendakari Imanol Pradales expresó su optimismo respecto al futuro del modelo cooperativo y la economía social en la región, subrayando que la creación de la plataforma ASETT representa un paso clave en el fortalecimiento de estos sectores.
Además, anticipó que el foro internacional que se está celebrando actualmente tendrá un impacto positivo en la promoción y difusión de estos valores a nivel global.
El acto tuvo lugar en el Teatro Victoria Eugenia de Donostia, donde Pradales participó en la entrega del premio ‘Denon Artean’, un reconocimiento que honra al cooperativismo vasco y su contribución al desarrollo económico y social del territorio.
Este año, el homenaje fue dirigido al Parlamento Vasco, que ha sido un pilar fundamental en el impulso y consolidación del modelo cooperativo en Euskadi.
Durante su intervención, el Lehendakari reafirmó su compromiso con esta forma de economía basada en principios de igualdad, solidaridad y sostenibilidad.
Mencionó que la creación de ASETT, una iniciativa que surge de la colaboración entre diversos actores sociales y económicos, marcará un avance significativo en la innovación en el sector.
Pradales también recordó los logros alcanzados en la legislatura actual, como la incorporación de Konfekoop en las políticas activas de empleo, que busca promover la inserción laboral a través de la economía social.
Asimismo, destacó la modificación legislativa que permite a las cooperativas disponer de mayores recursos en situaciones de emergencia, facilitando así su resiliencia frente a desafíos económicos.
Además, mencionó la puesta en marcha de nuevos instrumentos de financiación, con el fin de impulsar proyectos de emprendimiento social y crecimiento cooperativo.
La participación del Gobierno Vasco en el ASETT, también resaltada por Pradales, evidencia el interés por potenciar la economía social desde diferentes frentes.
El dirigente vasco subrayó que estos avances, aunque importantes, no son suficientes. Instó a continuar con una hoja de ruta que priorice la proactividad, la cercanía y la cooperación público-privada, en línea con el espíritu de ‘Denon Artean’, que literalmente significa ‘desde el corazón’.
Para ello, resaltó la importancia de que las instituciones, las empresas, las asociaciones y la ciudadanía trabajen en conjunto con el fin de alcanzar el bienestar social y la justicia.
Por último, Pradales elogió el modelo de economía social vasco, que pone a las personas en el centro de sus políticas y considera la riqueza como un medio para lograr el bienestar colectivo y reducir las desigualdades.
Sin embargo, advirtió que el legado no debe darse por sentado, y que en un contexto global marcado por cambios demográficos, tecnológicos y sociales, la competitividad y los valores cooperativos deben mantenerse vivos y fortalecer la visión inclusiva del territorio.
Este compromiso por la economía social no es nuevo en Euskadi. Desde mediados del siglo XX, la región ha sido pionera en el desarrollo de cooperativas y empresas de economía social, que han contribuido a crear empleo, fomentar la igualdad y promover una economía más sostenible.
La visión del país hacia el futuro pasa por seguir consolidando estos pilares, fortaleciendo la colaboración entre actores públicos y privados y adaptándose a los desafíos de un entorno globalizado y en constante cambio.
