El Gobierno Vasco otorga el prestigioso Premio René Cassin 2025 a la relatora de la ONU, Francesca Albanese, reconocida por su dedicación a la protección de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados y su trabajo en el ámbito internacional.
Albanese, que actualmente cumple su segundo mandato en este cargo, ha sido pionera en visibilizar las violaciones que enfrentan las comunidades en zonas de conflicto y ocupa un lugar destacado como la primera mujer en desempeñar este rol en el ámbito de la ONU.
La ceremonia de entrega se celebrará el 10 de diciembre, coincidiendo con el Día Internacional de los Derechos Humanos, en la sala Multibox de EITB en Bilbao.
Estará presidida por el Lehendakari Imanol Pradales y contará con la presencia de la consejera de Justicia y Derechos Humanos, María Jesús San José.
Este acto no solo busca honrar la trayectoria de Albanese, sino también recordar el compromiso de Euskal Herria con la promoción y protección de los derechos fundamentales en el mundo.
El Premio René Cassin, que se instituyó en 2003, busca reconocer públicamente a quienes trabajan en la defensa de los #derechos humanos a nivel internacional.
Su nombre rinde homenaje a René Cassin, nacido en Baiona en 1887, quien fue uno de los principales inspiradores de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 1968 por su incansable labor en favor de los derechos humanos.
El jurado, formado por destacados expertos en derechos humanos, ha señalado que Albanese destaca por su rigor, valentía e independencia. Han mencionado que su trabajo en Naciones Unidas ha sido fundamental para denunciar violaciones, promover la rendición de cuentas y exigir el cumplimiento de las normas internacionales en contextos complicados como Palestina, Ucrania y Sudán.
Desde una perspectiva histórica, la región de Oriente Medio y el conflicto palestino-israelí han sido una de las cuestiones más delicadas en la política internacional desde la creación del Estado de Israel en 1948.
Durante décadas, la comunidad internacional ha luchado por establecer mecanismos efectivos para garantizar los derechos de los residentes en los territorios ocupados, sin éxito definitivo en muchos casos.
La figura de Albanese, en este contexto, representa una esperanza y un ejemplo de compromiso en la lucha por la justicia.
El jurado también resaltó la importancia de avanzar hacia una paz con justicia que respete el Derecho Internacional
El jurado también resaltó la importancia de avanzar hacia una paz con justicia que respete el Derecho Internacional, haciendo un llamado a detener los conflictos armados y acabar con la impunidad por los crímenes internacionales.
La situación en Ucrania, Sudán y Palestina continúa siendo uno de los mayores desafíos para la comunidad global en materia de derechos humanos.
Esta distinción también valora la labor de Albanese por su fortaleza ética y su conocimiento técnico, que le permite contribuir con rigor en los informes y recomendaciones a organismos internacionales.
En sus discursos, Albanese ha pedido un compromiso firme para garantizar los derechos de las comunidades más vulnerables y ha dejado claro que solo a través del respeto al Derecho Internacional se podrá lograr una paz duradera.
