Supuestamente, miles de conductores en Europa podrían estar en riesgo debido a airbags falsificados que parecen legítimos. Expertos alertan sobre los peligros de las piezas de imitación y cómo identificarlas para proteger la seguridad vial.

La fabricación y venta de #airbags falsos no es un fenómeno nuevo, pero las autoridades advierten que la situación se ha agravado en los últimos años.
Presuntamente, estas piezas provienen de fabricantes extranjeros que no cumplen con los estrictos estándares de seguridad, y que venden sus productos a precios muy por debajo de los originales, lo que atrae a consumidores y talleres de reparación.
Se estima que en 2023, las autoridades aduaneras en la Unión Europea incautaron cerca de 150,000 piezas de airbags falsificados, un incremento del 25% respecto al año anterior.
Estos componentes, a menudo, contienen materiales y componentes de calidad muy inferior, y presuntamente, algunos contienen metal fragmentado que puede ser expulsado en caso de accidente.
Supuestamente, los airbags originales están diseñados con múltiples sistemas de seguridad que garantizan su correcto funcionamiento en situaciones de impacto, pero las #piezas de imitación carecen de estos sistemas, lo que aumenta el riesgo de fallos catastróficos.
En algunos casos, se han reportado explosiones de airbags falsos durante su despliegue, lo que puede causar lesiones graves o incluso la muerte.
La historia de los airbags falsificados se remonta a principios de la década del 2000, cuando la demanda de componentes de seguridad aumentó y la oferta ilícita también creció.
Europa también enfrenta una situación similar
En aquel entonces, se registraron varias muertes relacionadas con airbags defectuosos en Estados Unidos, y ahora, #Europa también enfrenta una situación similar.
Para evitar ser víctima de estas falsificaciones, los expertos recomiendan a los propietarios de vehículos de segunda mano realizar una revisión exhaustiva antes de comprar o reemplazar componentes de seguridad.
Es fundamental solicitar informes de historial del vehículo y acudir a talleres autorizados o concesionarios de confianza.
Además, durante el mantenimiento, es importante consultar la marca y origen de las piezas instaladas y desconfiar de precios excesivamente bajos en compras online o en mercados informales.
Presuntamente, algunos talleres ilegales instalan airbags falsos sin que el conductor se dé cuenta, poniendo en riesgo su integridad física.
Las autoridades de seguridad vial también han emitido pautas para detectar airbags falsificados. Entre ellas, verificar la calidad del componente, buscar marcas reconocidas y solicitar la certificación del fabricante. La comunidad automovilística insiste en que, en caso de sospecha, se debe acudir inmediatamente a un especialista para realizar una inspección completa.
En conclusión, aunque los airbags falsificados puedan parecer una opción económica, los riesgos asociados superan con creces cualquier posible ahorro.