Las autoridades sanitarias informan un aumento en los casos de salmonela vinculados a pepinos contaminados en varias regiones de Estados Unidos, con nuevas alertas y retiradas de productos en tiendas destacadas.

La incidencia de infecciones por salmonela en Estados Unidos continúa en aumento debido al consumo de pepinos contaminados, según informan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).
Hasta la fecha, se han reportado casos en 18 estados diferentes, con un incremento significativo en las hospitalizaciones relacionadas.
Este brote de salmonela ha provocado una serie de retiradas voluntarias y obligatorias por parte de diversos minoristas y productores. La cadena de supermercados Target fue una de las primeras en emitir una alerta, retirando productos comprados entre el 7 y el 21 de mayo, incluyendo pepinos individuales, empaques de dos unidades y productos preparados como ensaladas de pollo con limón y especias, bowls de arroz con salmón y rollos de California con arroz blanco.
El origen del brote se remonta a la empresa Bedner Growers, con sede en Florida, que cultiva los pepinos afectados y distribuye a varias cadenas de supermercados en todo el país.
La FDA y el CDC inicialmente vincularon esta producción a un brote anterior ocurrido el año pasado, en el que más de 550 personas resultaron infectadas y 155 fueron hospitalizadas en 34 estados y el Distrito de Columbia.
Durante la investigación, se descubrió que Bedner Growers utilizaba agua no tratada de canales de riego contaminados con la bacteria Salmonella, lo que contribuyó a la propagación del brote.
Además, se identificó que varias empresas de distribución y ventas minoristas también estaban reempaquetando pepinos o utilizándolos en productos listos para consumir, elevando el riesgo de exposición.
A nivel mundial, la salmonela es responsable de aproximadamente 1.35 millones de infecciones anuales, con cerca de 26,500 hospitalizaciones y unas 420 muertes, según datos de la CDC y la FDA. La bacteria causa síntomas como diarrea, fiebre y dolor abdominal que suelen aparecer entre seis horas y seis días después de la exposición y pueden durar entre 4 y 7 días.
Retiran en Estados Unidos y Europa varios productos por brote de salmonela en pepinos
Varias cadenas de supermercados en EE.UU. y Europa han iniciado retiros voluntarios de productos que contienen pepinos afectados por un brote de salmonela que ha causado al menos 26 casos en 15 estados. La alerta afecta principalmente productos de pepino de diferentes marcas y formatos, incluyendo sushi y ensaladas, adquiridos en cadenas como Kroger, Walmart y Harris Teeter. La Organización de Seguridad Alimentaria recomienda a los consumidores revisar sus compras y desechar cualquier producto implicado para evitar riesgos de salud.En casos severos, puede provocar complicaciones como infecciones en la sangre, dolores musculares intensos y fiebre elevada.
El brote en Estados Unidos ha afectado principalmente a estados como Georgia, Indiana, Massachusetts, California, Florida, Illinois y otros, sumando un total de 45 casos confirmados hasta ahora.
La mayoría de los afectados no ha reportado fallecimientos, pero la gravedad de la enfermedad requiere atención médica inmediata.
Las autoridades recomiendan a los consumidores que tengan pepinos en casa verificar su origen y desecharlos si no están seguros de su procedencia. También aconsejan limpiar cuidadosamente las superficies y utensilios que hayan estado en contacto con los pepinos contaminados. La historia del brote señala la importancia de controlar la calidad del agua utilizada en la agricultura y de fortalecer los protocolos de seguridad en la cadena alimentaria para evitar futuras infecciones.
Este brote refuerza la relevancia de estar atentos a las alertas de retiro de productos y de seguir las indicaciones de las autoridades sanitarias para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos.
La salmonela, aunque prevenible, representa un riesgo serio para la salud pública, especialmente en un contexto donde el comercio de alimentos frescos y preparados continúa en auge.
La vigilancia constante y las buenas prácticas de higiene son clave para reducir la incidencia de estos brotes y garantizar la seguridad de los consumidores.