Un chef amateur de Massachusetts convirtió su pasión por hacer pizza en un éxito viral en YouTube, logrando reconocimiento internacional y expandiendo su negocio en medio de un mercado competitivo.
La historia de este hombre de 50 años, que aprendió a hacer #pizza gracias a su abuela y a su herencia siciliana, ilustra cómo la pasión puede abrir puertas a oportunidades inesperadas en la era digital.
Arron Capron siempre tuvo una inclinación por la gastronomía, especialmente por la pizza. Desde sus años de juventud, en Detroit y Brooklyn, su identidad culinaria estuvo marcada por recetas familiares y sabores tradicionales. Sin embargo, fue durante la pandemia de COVID-19 cuando decidió dar un paso más allá y convertir su afición en un negocio. En 2021, abrió su primera pequeña tienda en un antiguo gallinero en Sandwich, con un presupuesto muy ajustado, equivalente a unos 2,000 euros. La acogida fue tan positiva que en 2022 se trasladó a un local más grande en Plymouth, y en 2023, a su actual establecimiento en el centro de la ciudad.
Su historia cambió radicalmente tras un encuentro con Shane Uriot, un joven creador de contenido en #YouTube con más de 22,000 suscriptores, dedicado a explorar la cocina y los chefs emergentes.
Uriot descubrió un video de Capron en el que preparaba pizzas en su pequeña tienda, y quedó impresionado por la pasión y el talento del chef. Sin dudarlo, visitó su local y grabó un video titulado "Inside the 1-Man Pizza Shop Making 150 Pizzas A Night". La publicación se convirtió en un éxito rotundo, logrando más de 1.1 millones de visualizaciones en apenas dos meses.
Este #viral impulso catapultó a Capron a la fama, atrayendo clientes de todas partes y multiplicando sus pedidos. Actualmente, cuenta con más de 6,300 seguidores en Instagram y cerca de 4,700 en Facebook, quienes disfrutan de sus creativas recetas y su historia inspiradora.
La notoriedad en #redes sociales también ha traído a Capron una avalancha de correos electrónicos y solicitudes de asesoría de chefs y emprendedores de países como Austria
La notoriedad en redes sociales también ha traído a Capron una avalancha de correos electrónicos y solicitudes de asesoría de chefs y emprendedores de países como Austria, Australia y Corea del Sur.
A pesar de su éxito, Capron sigue siendo un chef humilde. La clave de su receta, según comparte, radica en distribuir cuidadosamente los ingredientes, controlar el tiempo de cocción y dejar espacio para que el sabor del sauce y el queso se destaquen.
Entre sus recetas favoritas están la pizza "Road to Rangoon", con cangrejo, queso crema y salsa chili, y la innovadora "Loaded Tater", con papas fritas, queso, ajo y crema.
Su objetivo a futuro es convertirse en un referente en la enseñanza de la pizza, ofreciendo cursos rápidos donde asegura que cualquiera puede aprender a hacer una pizza de calidad en un día.
Además, no descarta expandirse a otras ciudades y abrir franquicias, aunque mantiene la idea de que su negocio debe seguir siendo familiar. La posibilidad de abrir en Boston, específicamente en el área del Seaport, está en su lista de sueños.
Mientras tanto, Capron continúa atendiendo su negocio en The Edge Pizza, abierto de miércoles a domingo, con horarios que van desde las 11:30 hasta las 21:00 horas, y con la satisfacción de saber que su pasión ahora inspira a miles en todo el mundo.
