Los mercados bursátiles de Estados Unidos experimentaron una notable alza tras el anuncio de un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, logrando niveles que no se veían en más de dos meses. El Dow Jones subió más de 1.160 puntos, mientras que el S&P 500 alcanzó su nivel más alto en más de dos meses, impulsados por la reducción de aranceles y la esperanza de un acuerdo duradero. Analistas consideran esta noticia como un alivio para la economía global y las empresas que operan en ambos países, aunque advierten sobre posibles reacciones volátiles en los próximos días debido a la cercanía del plazo de la pausa de 90 días en las tarifas.
La noticia de que ambas potencias acordaron una pausa de 90 días en la escalada de #tarifas arancelarias provocó un rally en las bolsas, alcanzando niveles que no se veían desde hace más de dos meses.
Este acuerdo temporal contempla una reducción significativa en los aranceles impuestos durante la disputa comercial. Específicamente, Estados Unidos anunció que reducirá sus tarifas a un 30%, desde un 145%, en tanto que China disminuirá los suyos al 10%, desde un 125%.
Además, ambas naciones acordaron suspender la imposición de nuevas tarifas durante este período, con la esperanza de negociar un acuerdo más completo en los próximos meses.
Históricamente, las tensiones comerciales entre #EE. UU. y China han impactado negativamente en los #mercados globales. Desde la primera imposición de aranceles en 2018 por parte del expresidente Donald Trump, las bolsas han experimentado volatilidad y caídas significativas, afectando desde empresas tecnológicas hasta productores agrícolas.
Sin embargo, esta última noticia ha revitalizado las expectativas económicas, especialmente en sectores que dependen del comercio internacional.
El índice Dow Jones Industrial Average subió 2.81%, sumando aproximadamente 1,160 puntos y cerrando en 42.410,10 puntos. El índice S&P 500, considerado un barómetro de la #economía estadounidense, avanzó un 3.26%, alcanzando los 5.844,19 puntos, su nivel más alto desde finales de marzo. Por su parte, el Nasdaq, con mayor peso en tecnología, registró un incremento del 4.35%, cerrando en 18.708,34 puntos.
Este impulso en los mercados también se refleja en el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años, cuyo rendimiento subió a 4.475%, en respuesta a la percepción de que menores tarifas pueden evitar una recesión y reducir la necesidad de recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal.
Además, los precios del petróleo aumentaron más del 1%, respaldados por las expectativas de una economía global en crecimiento. Por otro lado, el oro cayó aproximadamente un 3%, ya que disminuyó la demanda de activos refugio.
La satisfacción en los mercados también fue palpable en las #acciones de empresas con fuertes vínculos comerciales con China. Grandes cadenas minoristas como Target, Home Depot y Best Buy experimentaron incrementos en sus valores bursátiles, impulsadas por el alivio en los costos de importación.
Target subió casi un 5%, Home Depot cerca de un 4%, y Best Buy más de un 6.5%. Empresas como Williams-Sonoma y Nike, con una considerable producción en China, también vieron mejoras en sus acciones.
Que ensambla muchos de sus iPhones en China
Las compañías tecnológicas no se quedaron atrás. Apple, que ensambla muchos de sus iPhones en China, subió más del 6%, mientras que Tesla recuperó su valor de mercado por encima de los 1 billón de dólares por primera vez desde febrero, impulsada por las expectativas de una mayor demanda en China y la mejora en las condiciones comerciales.
Las acciones de empresas chinas listadas en EE. UU., como Alibaba, JD.com y PDD, también registraron fuertes avances. Alibaba aumentó un 5.82%, JD.com un 6.47%, y PDD un 6.14%. En el sector automotriz, Ford y General Motors vieron incrementos en sus acciones, en línea con las expectativas de una mayor apertura de mercado.
Mientras tanto, en el ámbito internacional, el Viceprimer Ministro chino He Lifeng destacó que las negociaciones en la reunión del domingo fueron “sinceras, profundas y constructivas”, logrando “progresos sustanciales” y alcanzando “consensos importantes”.
El Secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, anticipó nuevas reuniones en las próximas semanas para avanzar hacia un acuerdo más completo.
Este acuerdo representa un alivio para las empresas y los inversores, que durante años han enfrentado la incertidumbre y los costos adicionales derivados de la guerra comercial.
La reducción de tarifas no solo favorece a las grandes corporaciones, sino también a las pequeñas y medianas empresas que dependen del comercio internacional, incluyendo a los minoristas en línea y fabricantes de productos de consumo.
En términos históricos, la relación comercial entre EE. UU. y China ha sido una de las más complejas y estratégicas del siglo XXI. Desde el ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio en 2001, las tensiones han ido en aumento, influenciando la política global, las cadenas de suministro y las #inversiones internacionales.
Este acuerdo temporal marca un paso positivo, aunque muchos expertos advierten que la negociación aún puede presentar desafíos y que la volatilidad en los mercados podría persistir en los próximos días.
En conclusión, la noticia de un acuerdo parcial ha sido recibida con optimismo por los mercados financieros, quienes ven en esto una oportunidad para estabilizar la economía y fortalecer las perspectivas de inversión en los Estados Unidos y más allá.
