Retromobile en París destaca por su amplia variedad de coches clásicos, desde joyas de colección hasta modelos accesibles, y su historia rica en automovilismo.
El Salón Retromobile en París se ha consolidado como uno de los eventos automovilísticos más destacados a nivel mundial. Este año, dos automóviles en particular capturaron la atención de los asistentes por su exclusividad y precios sorprendentes. Por un lado, un McLaren F1, valorado en 21 millones de euros, y por otro, un Citroën AX10 de 1988 que se ofreció por tan solo 11,000 euros. Mientras que el McLaren F1 es una pieza de colección extremadamente rara, con solo 1,600 kilómetros recorridos, el Citroën AX10 se presentaba como una joya de nostalgia, habiendo sido utilizado únicamente durante 50 kilómetros.
Retromobile tiene sus raíces en un evento de nicho donde coleccionistas y entusiastas podían intercambiar autos y piezas clásicas, tanto de alta gama como de modelos más accesibles.
Bruce Meyer, un reconocido coleccionista y presidente del Museo Automotriz Petersen en Los Ángeles, ha sido un asistente frecuente durante más de tres décadas.
Inicialmente, él visitaba el evento en su tiempo libre, pero ahora realiza un viaje anual exclusivamente para disfrutar de este espectáculo que se ha expandido a tres pabellones en el Parque de Exposiciones de París.
Este año, los visitantes pudieron admirar centenares de vehículos clásicos y motocicletas, muchos de los cuales estaban a la venta. Entre las piezas más notables, se encontraba un motor de Fórmula 1 Chrysler-Lamborghini, diseñado por Mauro Forghieri, que se ofrecía por 93,000 euros, junto con una variedad de componentes y accesorios automovilísticos.
El evento también presentaba una selección de ropa, arte y recuerdos relacionados con el automovilismo.
Los precios de los coches en Retromobile variaban enormemente. Se exhibieron modelos con etiquetas de precio que oscilaban entre seis y siete cifras, como el Lamborghini Miura P400 S de 1969, una rareza pintada en un hermoso verde oscuro, y un Ferrari 250 SWB de 1960 que fue parte de la carrera del Tour de Francia.
Sin embargo, también había una sección dedicada a coches más asequibles, donde se podían encontrar vehículos por menos de 30,000 euros, como un Oldsmobile Toronado de 1966 y un Peugeot 504 Cabriolet.
El lema del evento, "el pasado siempre tiene un futuro", resuena especialmente en un momento en que los fabricantes de automóviles tradicionales enfrentan una creciente competencia de empresas chinas que producen vehículos con tecnología de última generación.
Durante el evento, varias marcas icónicas, incluidas Renault y Citroën, presentaron exhibiciones que unían sus modelos históricos con sus versiones modernas, mostrando la evolución del diseño y la ingeniería automotriz.
Este año marca el 70 aniversario del Citroën DS, un automóvil que fue revolucionario en su época. DS Automobiles, la marca de lujo derivada de Citroën, recreó el emblemático DS Balloon, mostrando su innovador sistema de suspensión hidropneumática.
Por su parte, Renault optó por conectar la nostalgia con la modernidad, exhibiendo su modelo R4 de 1961 junto a futuros eléctricos que mantienen el espíritu visual de sus predecesores.
Mazda celebró el 35 aniversario de su famoso deportivo MX-5 Miata, mientras que Mercedes-Benz mostró una impresionante colección de vehículos de su legado, incluyendo un 300SL Gullwing y un histórico modelo que perteneció a la famosa cantante Maria Callas.
Retromobile es un evento que no solo resalta la rica historia del automovilismo, sino que también sirve como un punto de encuentro para coleccionistas, restauradores y entusiastas, ofreciendo una experiencia única donde la pasión por los automóviles clásicos se vive en cada rincón.
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