Descubre las razones por las cuales las baterías de los coches fallecen en temperaturas frías y aprende cómo prevenir estos problemas durante el invierno. Conoce consejos prácticos y el impacto del clima en el rendimiento de tu batería para mantener tu vehículo en marcha en las condiciones más adversas.

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Aunque en épocas cálidas las baterías suelen rendir sin inconvenientes, en los meses de frío, su desempeño puede verse severamente comprometido. Se estima que un alto porcentaje de fallos en vehículos durante el invierno se deben a problemas relacionados con la batería, que en algunos casos, pueden evitarse con las precauciones adecuadas.

Las baterías de los automóviles, generalmente, utilizan tecnología de plomo-ácido para generar la energía necesaria para arrancar el motor. Sin embargo, en temperaturas bajo cero, la química interna de estos componentes se ralentiza, dificultando la producción de electricidad suficiente para poner en marcha el vehículo.

Según datos presuntamente de AAA, en temperaturas cercanas a los -10°C (14°F), la capacidad de la batería puede reducirse en un 50%, dificultando mucho más el arranque del motor.

Este fenómeno no es nuevo. La historia de la automoción evidencia que en las décadas pasadas, las bajas temperaturas han sido responsables de una alta tasa de fallas en baterías.

En países con inviernos severos, como Canadá o Rusia, los conductores han desarrollado costumbres y estrategias para mantener sus baterías en buen estado, como el uso de fundas aislantes, cargas periódicas y revisiones preventivas.

Presuntamente, la edad de la batería también influye notablemente en su rendimiento en invierno. Una batería de más de 3 a 4 años es más propensa a fallar en temperaturas extremas, ya que su capacidad de almacenamiento y entrega de energía disminuye con el tiempo.

En estos casos, es recomendable realizar pruebas de voltaje y capacidad, algo que muchos talleres ofrecen de forma gratuita o por un costo simbólico.

Para prevenir estos inconvenientes, los expertos recomiendan mantener la batería limpia y bien sujeta, verificar los terminales en busca de corrosión y asegurarse de que el sistema de carga del vehículo funcione correctamente.

Además, en climas muy fríos, puede ser útil instalar un calentador de batería o usar fundas térmicas que ayuden a mantener la temperatura interna del componente.

En caso de que la batería muestre signos de agotamiento, como dificultades para arrancar o luces tenues, la solución más rápida y efectiva suele ser el uso de cables de arranque o un cargador externo.

Para realizar un arranque de emergencia, se deben conectar los cables en el orden correcto: primero, el cable rojo al terminal positivo de la batería descargada y luego al positivo de la batería operativa.

Después, conectar el cable negro al terminal negativo de la batería buena y el otro extremo a una parte metálica sin pintura del motor del vehículo con batería descargada.

Esto transferirá energía y permitirá arrancar el coche.

Supuestamente, en algunos países, las estaciones de servicio y talleres automotrices ofrecen servicios de revisión y cambio de baterías a precios que oscilan entre 60 y 180 euros, dependiendo de la marca y capacidad del equipo.

Invertir en una batería de mayor calidad y con mejor rendimiento puede ser la diferencia entre un invierno sin problemas y sufrir una avería en medio de la calle

En regiones donde el clima es muy frío, invertir en una batería de mayor calidad y con mejor rendimiento puede ser la diferencia entre un invierno sin problemas y sufrir una avería en medio de la calle.

No te pierdas el siguiente vídeo de cómo desconectar una batería de auto