El tenista argentino Sebastián Báez se coronó campeón del Abierto de Río de Janeiro, logrando así su séptimo título en la ATP.

Sebastián Báez ha escrito un nuevo capítulo en su prometedora carrera al consagrarse campeón del Abierto de Río de Janeiro, uno de los torneos más destacados del circuito ATP 500.
En una competencia que se ha mostrado difícil para muchos jugadores de elite, incluyendo a leyendas como Rafael Nadal y Carlos Alcaraz, Báez logró una victoria impresionante que no solo habla de su destreza en la cancha, sino también de su tenacidad y crecimiento personal en un deporte tan competitivo.
Con esta victoria, Báez sumó su séptimo título en su carrera, un hito significativo que lo sitúa junto a grandes nombres del tenis argentino. Desde 2007, solo dos jugadores argentinos habían conseguido más de un título en torneos ATP 500: Juan Martín Del Potro, con siete, y Leonardo Mayer, con dos.
Ahora, Báez se une a este exclusivo grupo, elevando así aún más las expectativas sobre su futuro.
La final, disputada contra el francés Alexandre Muller, fue un encuentro en el que Báez demostró su dominio desde el primer set. El marcador fue un contundente 6-2, 6-3 tras apenas 86 minutos de juego, un claro reflejo de su superioridad durante toda la lucha. Al recibir el trofeo de manos de Del Potro, se pudo apreciar la inmensa felicidad del joven tenista, un momento que ambos compartirán para siempre en sus memorias.
El camino hacia esta victoria no fue fácil para Báez, quien había enfrentado una etapa complicada en su carrera en los meses previos al torneo. De hecho, antes de llegar a Río, había jugado 42 partidos desde su último título en Santiago, de los cuales solo había ganado 16. Esa dinámica lo llevó a descender en el ranking hasta perderse en la primera ronda de varios torneos. Sin embargo, su decisión de participar en el challenger de Rosario parecía haber dado frutos, ayudándole a recuperar la confianza que tanto necesitaba.
Valencia acogerá el campeonato mundial de tenis Sub-16: Copa Davis Junior
Valencia será la sede del campeonato mundial de tenis Sub-16, la Copa Davis Junior, del 1 al 4 de agosto. Tres jugadores valencianos forman parte del equipo español. El torneo se llevará a cabo en el CM Valencia Tennis Center.La jornada final en Río también tuvo un gran valor emocional para Báez, quien dedicó su triunfo a la memoria de Diego González, un antiguo preparador físico que dejó una huella profunda en su vida y carrera.
Esta victoria significó no solo un resurgimiento en su carrera, sino también una conexión con su pasado y aquellos que lo han acompañado en su trayectoria.
A medida que Báez avanza en su carrera, los próximos meses prometen ser cruciales. Después de esta cita brasileña, el tenista se presentará en Santiago, donde también defenderá su título, y posteriormente participará en los importantes torneos de Indian Wells y Miami, además de la prestigiosa gira europea sobre superficie de arcilla.
La cercanía de Roland Garros añade un sabor especial a su calendario, y muchos esperan que este nuevo impulso lo lleve a alcanzar mayores logros en esos eventos.
Báez es un jugador que ha tenido que superar desafíos significativos debido a su estatura de 1,70 metros, algo que lo obliga a trabajar más en aspectos técnicos y tácticos de su juego.
Con una mejora notable en su servicio y una gran habilidad para leer el juego del rival, su enfoque y dedicación han comenzado a dar resultados positivos.
El joven argentino está demostrando que, a pesar de las adversidades, su talento y preparación pueden abrirle las puertas para escalar aún más en el ranking ATP.
Es indudable que el triunfo en Río no solo es un reflejo de lo que ha trabajado, sino un trampolín hacia lo que podría ser un año lleno de éxitos y logros para este tenista argentino que sigue enamorando a los aficionados del tenis con cada partido.