Hady Habib, un tenista de 26 años nacido en Houston, Estados Unidos, ha logrado un hito significativo en su carrera y en la historia del deporte libanés al convertirse en el primer jugador de su país en ganar un partido en un torneo de Grand Slam.

Este emocionante momento tuvo lugar en la madrugada del domingo en la cancha 13 de Melbourne Park, donde derrotó al jugador chino Bu Yunchaokete, situado en el puesto 65 del ranking mundial, con un marcador de 7-6 (7-4), 6-4 y 7-6 (8-6).

Habib, quien representa a Líbano después de trasladarse allí con su familia siendo niño, no podía ocultar su emoción tras la victoria.

En la conferencia de prensa posterior al partido, expresó: "Este probablemente sea uno de los mejores días de mi carrera.

Es un sentimiento increíble conseguir este triunfo, no solo por mí sino también por el Líbano y el tenis libanés.

El público estuvo absolutamente salvaje, fue aún más especial lograrlo frente a ellos".

Con este triunfo, Habib se asegura un cheque de 123.000 dólares estadounidenses, un monto que equivale a aproximadamente 115.000 euros, lo que representa casi la misma cantidad que había acumulado en sus seis años como profesional desde 2016. El tenista, que actualmente ocupa el puesto 216 en el ranking mundial, se mostró optimista y confiado, afirmando: "Sentía que podía lograr este tipo de cosas.

He estado jugando realmente bien al final del año pasado.

Nos propusimos algunos objetivos para este torneo.

Inicialmente, solo era clasificar, que lo logré. Hoy solo salí y jugué cada punto; jugué mi mejor tenis, creo.

Estoy extremadamente agradecido y feliz".

Entrenado por el argentino Patricio Heras, quien tuvo una carrera marcada por una suspensión de tres años por arreglo de partidos, Habib ha estado en constante crecimiento en los últimos meses.

A pesar de ser un jugador relativamente desconocido, ya había tenido un paso significativo por el circuito, enfrentando al reconocido Carlos Alcaraz en los Juegos Olímpicos de París 2024, un momento que él mismo recuerda con cierta incertidumbre, apuntando: "Cuando pude pisar Roland Garros parecía perdido, no sabía hacia dónde ir.

Si alguien me hubiese estado observando, habría pensado que yo era un turista y no un jugador".

En el cierre del año pasado, Habib tuvo logros destacados, como llegar a los cuartos de final del Challenger de San Pablo y consagrarse campeón del Challenger de Temuco, lo que le permitió convertirse en el primer tenista de Líbano en ganar un torneo ATP. Este reconocimiento a nivel internacional ha puesto al pequeño país asiático en el mapa del tenis, siendo Líbano la octogésima quinta nación en conquistar un título en el circuito.

Las victorias durante su camino hacia el Abierto de Australia le otorgaron aún más confianza.

Habib se mostró agradecido por el apoyo de sus compatriotas presentes en Melbourne: "El apoyo que recibí estos últimos días ha sido increíble.

Mi teléfono no ha parado de sonar.

Tengo familia en Sídney que vino a verme.

Ha sido un tiempo muy especial para mí al tener a toda la gente del Líbano aquí. Sentí la energía, definitivamente me ayudaron a conseguir el triunfo hoy".

Con esta victoria, Habib ha abierto un nuevo capítulo en su carrera y en la historia del tenis en Líbano.

Sin embargo, el camino hacia el éxito aún es largo.

En la próxima ronda, se enfrentará al experimentado francés Ugo Humbert, clasificado en el puesto 14 del ranking ATP, quien viene de eliminar al italiano Matteo Gigante.

Sin duda, el crecimiento de Habib es un ejemplo a seguir para muchos jóvenes deportistas libaneses que sueñan en grande.