Rafael Di Zeo, líder de la barra brava de Boca Juniors, se vio involucrado en un incidente en el peaje de Toledo que impidió que él y cerca de 60 hinchas ingresaran al estadio Kempes para el partido de semifinales. La gendarmería encontró armas de fuego, alcohol y drogas en la revisión a los micros que transportaban a los seguidores.
En un incidente inesperado, Rafael Di Zeo, reconocido líder de la barra brava de Boca Juniors, junto a aproximadamente 60 hinchas, no lograron acceder al estadio Kempes para presenciar el encuentro de semifinales ante Estudiantes.
El motivo de esta situación se debió a complicaciones en el peaje de Toledo, ubicado en una ruta cordobesa.
Durante la revisión realizada por la Gendarmería, se encontraron cuatro armas de fuego, además de alcohol y estupefacientes en los micros que trasladaban a los fanáticos.
La gendarmería decidió trasladar a varios de los hinchas, a excepción de Di Zeo, a una fiscalía para prestar declaración sobre lo sucedido.
Por su parte, el líder de La 12 brindó su versión de los hechos haciendo énfasis en que no tenía conocimiento sobre las armas halladas.
Di Zeo manifestó su descontento con la situación y señaló que aquellos responsables de llevar las armas deberían asumir las consecuencias y no involucrar al resto de la barra.
A pesar de la confusión y los contratiempos, Di Zeo mantuvo su postura y se negó a regresar al lugar de la inspección, aclarando que no estaba dispuesto a dar su foto para los medios.
Posteriormente, se dio a conocer que 60 personas fueron trasladadas a una comisaría, aunque solo dos individuos se hicieron cargo de la posesión de las armas encontradas.
En declaraciones posteriores, Di Zeo expresó su descontento con la situación, argumentando que se trató de un montaje en su contra para generar un espectáculo mediático.
El líder de la barra brava afirmó que no estaba presente en el momento del hallazgo de las armas y que no había motivo para su detención.
Ante la polémica desatada, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, se pronunció en redes sociales en apoyo al operativo realizado.
Las armas confiscadas fueron puestas bajo custodia, mientras que Di Zeo decidió no ingresar al estadio hasta que se aclare la situación, haciendo énfasis en que busca evitar ser utilizado como una herramienta de distracción política.
El incidente en el peaje de Toledo dejó en evidencia la compleja relación entre la barra brava de Boca Juniors y las autoridades de seguridad, así como los desafíos que enfrentan los hinchas al momento de asistir a eventos deportivos de alto perfil.