Lara Casas y Zoe Díaz, jugadoras de Las Leonas, comparten su experiencia única en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde buscarán una medalla de bronce frente a Bélgica.
En un entorno lleno de emoción y camaradería, Lara Casas y Zoe Díaz, dos prometedoras jugadoras del equipo argentino de hockey, Las Leonas, se encuentran disfrutando de sus primeros Juegos Olímpicos en París 2024. Sentadas en la Villa Olímpica bajo un hermoso sol matutino, estas jóvenes no solo comparten una pasión por el deporte, sino también una conexión profunda que las hace inseparables.
Según miembros del cuerpo técnico, su relación es tan sólida que las discusiones entre ellas son típicas de hermanas.
Zoe comenta: "Es como tener una hermana.
Pasamos todo el tiempo juntas y cuando regresemos a Argentina, esto no cambiará".
Ambas jugadoras llegan a este evento histórico tras un vertiginoso ascenso en sus carreras.
Halagadas por haber sido parte del equipo junior que se consagró subcampeón en el Mundial Junior de Santiago de Chile el año pasado, ahora se preparan para enfrentar a Bélgica en busca de una medalla de bronce.
"Es increíble pensar que algo que soñamos se ha hecho realidad tan rápidamente", expresa Lara, de 20 años.
El club Italiano, donde ambas militan, siente un orgullo especial por su participación en los Juegos Olímpicos.
La capitana del equipo femenino, Greta Liporace, ha viajado a París para apoyarlas.
"Representar a nuestro club es algo extraordinario.
Sentimos el respaldo de nuestros compañeros y entrenadores, lo que nos impulsa a dar lo mejor de nosotras en cada partido", comenta Lara, quien comenzó a practicar hockey a los 9 años.
La experiencia de estar en la Villa Olímpica, rodeadas de atletas de todo el mundo, es completamente nueva para Lara y Zoe.
Ambas están decididas a disfrutar cada momento mientras mantienen el enfoque en sus objetivos deportivos.
"Nunca imaginé estar aquí. Desde que empezamos en enero con el seleccionado mayor, venir a París parecía un sueño inalcanzable", menciona Zoe.
Las dos jugadoras admiten que la atmósfera es asombrosa, y han tenido la oportunidad de encontrarse con atletas de fama mundial, aunque no todas sus búsquedas han sido exitosas: "Buscamos a Alcaraz por toda la Villa y no lo encontramos", cuenta Zoe con un tono de decepción pero con una sonrisa.
A pesar de la emoción, el plantel ha tenido que lidiar con una reciente derrota ante Países Bajos en semifinales, lo que les ha dejado un sabor amargo.
Sin embargo, han logrado superar rápidamente esa desilusión y están enfocadas en el próximo desafío, que las enfrentará a Bélgica por el tercer puesto: "Aunque perder fue duro, estamos listas para salir y darlo todo", reflexiona Zoe.
La capitana Rocío Sánchez Moccia, en un discurso motivador, enfatizó la importancia de dejar atrás lo negativo: "Una medalla de cualquier color es un gran logro y estamos decididas a luchar por el bronce". Las Leonas buscan asegurarse un lugar en la historia del hockey argentino, aspirando a agregar una nueva medalla a su palmarés, que ya incluye tres medallas de plata y dos de bronce en Juegos Olímpicos anteriores.
El encuentro con Bélgica, programado para el viernes a las 14:00 (hora local), marcará un corazón palpitante no solo en la cancha, sino también en los corazones de millones de argentinos que esperan con ansias ver a su equipo brillar en el escenario olímpico.