El próximo sábado 23 de noviembre, Racing Club se enfrentará a un desafío significativo al jugar su primera final internacional en más de tres décadas.

Este importante encuentro es especialmente relevante para el club, que no se encontraba en esta situación desde hace 32 años.

En total, será la sexta final de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) desde su creación, y el club busca su séptimo título internacional, un hito que reflejaría su trayectoria rica en la historia del fútbol sudamericano.

La historia de Racing se remonta al 25 de marzo de 1903, fecha en la que se fundó el club.

Su primera conquista internacional tuvo lugar el 9 de diciembre de 1913, cuando derrotó a Nacional de Uruguay por 3-2 en un partido histórico.

Esto fue destacado por el diario La Argentina, que al día siguiente del triunfo afirmó que el resultado debía ser motivo de orgullo y satisfacción entre los deportistas y aficionados, sobre todo después de años de espera sin ver un trofeo internacional en suelo argentino.

En aquella ocasión, más de 8000 hinchas celebraron la victoria en el Parque Central de Montevideo.

Racing había perdido la final del año anterior contra River Plate uruguayo, lo que hacía aún más valioso el triunfo de 1913. Desde entonces, Racing ha tenido una trayectoria variada, acumulando seis títulos de los trece que ha disputado.

A lo largo de los años, el club se convirtió en uno de los clubes más destacados en el fútbol argentino y sudamericano.

Durante las décadas de 1910 y 1920, Racing se consolidó como un verdadero potencia, siendo campeón de la Copa de Honor y estableciendo un legado que ha perdurado.

Con nombres icónicos que hicieron historia, como Joao Cardoso y Norberto Raffo, Racing ganó su primera y única Copa Libertadores en 1967 al vencer nuevamente a Nacional, este último rival con el que han tenido una rivalidad histórica.

Lo notable es que Racing no solo ha brillado en el ámbito nacional, sino que también se erigió como el primer campeón argentino en la Copa Europea-Sudamericana al derrotar al Celtic de Escocia en 1967, un hito que solidificó su lugar en la historia del futbol mundial.

En las últimas décadas, Racing ha tenido altibajos pero ahora regresa a la escena internacional como un club renovado, con la esperanza de que su próxima final le proporcione la gloria que ha buscado durante tanto tiempo.

Este encuentro se jugará a partido único y en terreno neutral, lo que agrega un nivel adicional de emoción, ya que el futuro de Racing en el ámbito internacional será definido en un solo partido.

Los hinchas se preparan para un fin de semana de celebración y expectativa, recordando no solo sus grandes victorias pasadas, sino también la búsqueda de nuevas conquistas.

Será una oportunidad para que el club reafirme su lugar entre los grandes del fútbol sudamericano y para que sus aficionados, que han mantenido la fe a lo largo de los años, disfruten de un momento que ha sido esperado durante demasiado tiempo.