A pesar de la suspensión de Lionel Messi en la MLS, el club mostró apoyo al capitán, quien asistió al partido y alentó a sus compañeros. Además, debutó Rodrigo De Paul, reforzando la plantilla en un momento crucial de la temporada.

La medida, que implicó la suspensión por un partido al astro argentino, fue interpretada por muchos como una muestra de que el jugador no goza de un trato privilegiado en la liga, y pone en evidencia que las reglas son iguales para todos los participantes.
A pesar de la sanción, Messi no dejó de asistir al estadio. En realidad, fue una oportunidad para reafirmar su liderazgo y compromiso con el equipo, ya que fue visto en el Chase Stadium de Fort Lauderdale apoyando a sus compañeros mientras animaba desde la tribuna.
Se lo observó vestido con una camisa blanca impecable, acompañado de su esposa Antonela Roccuzzo y sus hijos, en un gesto que habla de su papel como capitán y referente del club.
Además, Rodrigo De Paul, flamante incorporación de Inter Miami, fue presentado formalmente antes del partido, cambiando radicalmente la dinámica del equipo.
De Paul, que firmó con el club hasta 2029, fue recibido con entusiasmo por los hinchas y las autoridades del club. Su ingreso al campo de juego fue acompañado de un acto emotivo, donde fue entregada su camiseta número 7, y varias muestras de apoyo, como fuegos artificiales y un pequeño espectáculo de murga con ritmo argentino, que empezó a calentar el ambiente antes del encuentro.
El ex futbolista del Atlético de Madrid llegó con un aspecto renovado, luciendo un rapado que reflejaba su entusiasmo por comenzar esta nueva etapa en la MLS.
La presencia de #De Paul generó grandes expectativas
La presencia de De Paul generó grandes expectativas, y su participación prometía renovar las esperanzas de la afición, que anhelaba que el club retome la senda de los triunfos y positivos resultados.
Por otro lado, la relación entre Messi y la franquicia ha sido, en general, de admiración mutua, aunque la sanción refleje que en la #MLS no hay lugares para privilegios.
El comisionado de la liga, Don Garber, explicó que las reglas son claras y aplicadas a todos por igual. Sin embargo, el propietario de Inter Miami, Jorge Mas, expresó públicamente que la sanción cayó mal en el jugador, y que la decepción entre el entorno del club era palpable.
Mas también resaltó que Leo ha cumplido con sus obligaciones físicas y comerciales, jugando los 90 minutos en todos los partidos, incluso en medio de las altas temperaturas en Florida.
Mientras tanto, Messi no ha hablado específicamente sobre la sanción, aunque su presencia en el estadio y su apoyo a la plantilla despejaron posibles dudas sobre su compromiso.
Se espera que la relación entre el futbolista y la liga se mantenga en línea con las expectativas, especialmente con la renovación de su contrato que, según se sabe, termina a fin de año, y la llegada de De Paul como una pieza clave para mejorar el rendimiento del equipo.
El empate contra FC Cincinnati, líder de la conferencia este, dejó un sabor agridulce en las filas de Inter Miami. La expulsión de Messi y la polémica en la última jugada, con un gol anulado a favor del visitante, marcaron una jornada llena de sentimientos encontrados.