La influencia de Lionel Scaloni y la inversión millonaria de los dos grandes clubes del fútbol argentino marcan un nuevo capítulo en el mercado de fichajes.

El auge en el mercado de fichajes argentino se está viendo impulsado por varios factores, entre ellos el valor del dólar y la expectativa del Mundial de Clubes en 2025. Los dos grandes clubes del país, River Plate y Boca Juniors, están dispuestos a gastar unos 50 millones de euros para reforzar sus plantillas.

Esta inversión no solo representa un intento de mejorar sus equipos, sino también de competir al más alto nivel en torneos internacionales.

De manera notoria, dos figuras destacan en estas negociaciones: Marcelo Gallardo, entrenador de River, y Juan Román Riquelme, ícono del fútbol argentino y actual directivo de Boca.

Ambos están liderando esfuerzos para atraer a futbolistas de renombre, buscando convencer a estrellas de que una vuelta al fútbol argentino puede ser beneficiosa tanto para sus carreras como para el desarrollo del deporte en el país.

Sin embargo, hay otro nombre relacionado con estos movimientos que, aunque menos visible, es igualmente crucial: Lionel Scaloni.

Scaloni, quien ha dirigió la selección argentina y es muchas veces llamado el 'papá de la Scaloneta', ha influido indirectamente en este fenómeno.

A finales del año pasado, Scaloni hizo un llamado a los jugadores para que se mantengan activos en sus clubes.

"Necesitamos que los jugadores jueguen en sus equipos", decía Scaloni, haciendo un llamado claro a aquellos que, por diversas razones, no están teniendo el tiempo de juego necesario para ser considerados en la selección.

Esto puede haber llevado a una mayor motivación entre los futbolistas de élite para regresar a Argentina, donde tienen más oportunidades de jugar en lugar de permanecer en el banquillo en Europa.

A raíz de estas declaraciones, varios jugadores decidieron dar el salto de retorno y están siendo considerados por los clubes.

Por ejemplo, Germán Pezzella y Marcos Acuña han vuelto a la liga argentina tras una etapa con poco protagonismo en Europa.

Además, otros como Fabricio Bustos y Maximiliano Meza han firmado con River Plate con la esperanza de ser convocados nuevamente por Scaloni.

El interés de Boca Juniors también es palpable, ya que están intentando conseguir la ficha de Leandro Paredes, quien no ha logrado establecerse en el fútbol italiano.

Riquelme ha planteado ofertas formales, incluso frente a competiciones más lucrativas del fútbol árabe.

Mientras tanto, clubes secundarios como Estudiantes y Racing han estado activos en el mercado, incorporando jugadores que podrían captar la atención de la selección nacional.

El contexto de este mercado de pases es absolutamente singular, ya que puede ser recordado como uno de los más caros en la historia del fútbol argentino.

Se estima que más de 50 millones de euros serán invertidos en nuevas incorporaciones, y la influencia de Scaloni, aunque puede no ser medida en términos financieros, sin duda ha generado un cambio profundo en la forma en que los clubes argentinas están pensando respecto a sus plantillas y su competitividad a nivel internacional.

Sin lugar a dudas, el legado de Scaloni en el fútbol argentino podría ir más allá de los títulos, ya que su visión y liderazgo está marcando un nuevo camino para el deporte en el país.