En un encuentro lleno de emociones y decisiones polémicas, Belgrano y Unión se repartieron los puntos en un intenso partido en Córdoba.

El encuentro entre Belgrano y Unión dio lugar a una intensa batalla en el terreno de juego, donde ambos equipos buscaron una victoria que les permitiera consolidar sus aspiraciones en la Liga Profesional.

Mientras Belgrano tenía la oportunidad de alcanzar las primeras posiciones, Unión llegó a Córdoba con la ambición de tomar la punta del torneo.

Sin embargo, el resultado final implicó un intercambio de puntos que dejó a ambos equipos con un sabor agridulce.

El primer tiempo concluyó sin goles, pero no sin emociones.

A lo largo de los 45 minutos iniciales, Belgrano se mostró más peligroso, disponiendo de un par de oportunidades claras para abrir el marcador.

En la fase inicial, el equipo local estrelló un balón en el travesaño y más adelante, otro disparo se fue desviado al chocar con el poste.

Estos intentos, que mantuvieron a los aficionados al borde de sus asientos, fueron un anticipo de la intensidad del encuentro.

Al comenzar la segunda parte, el partido tomó un giro inesperado.

En apenas 34 segundos desde el reinicio, Unión logró anotarle a Belgrano con un gol espectacular.

Adrián Balboa, con un brillante toque de taco, logró desviar un centro de su compañero Mauro Pitton, marcando un tanto que parecía encaminar al Tatengue a la victoria.

Balboa, a pesar de su pasado en el club rival, disfrutó el momento de una manera contenida.

Este gol, sin duda, fue un ejemplo de la calidad y creatividad que pueden desplegar los jugadores en situaciones cruciales.

Tras el gol de Unión, parecía que el equipo visitante tenía el control del partido, pero el fútbol es impredecible.

En los instantes finales del encuentro, con el tiempo casi agotado, Belgrano logró igualar.

Un córner que se ejecutó con precisión culminó con un cabezazo certero de Matías Suárez, quien logró marcar el 1-1 en el último suspiro.

Este tanto generó una serie de revisiones en el VAR, que se prolongaron casi cinco minutos, aunque el resultado final fue que Suárez estaba habilitado.

La decisión, que vino desde la sala de Ezeiza, trajo alivio y celebración al equipo de Belgrano.

El empate, aunque celebrado por los anfitriones, dejó a Unión sintiendo que había perdido una oportunidad, ya que, a pesar del punto sumado, no pudieron posicionarse como líderes del torneo, quedando a la espera de otros resultados.

Por otro lado, Belgrano, aunque no logró la victoria, respira más tranquilo al mantenerse en la lucha por los primeros puestos.

Este partido, que tuvo su cuota de polémica y emoción, no solo reafirmó la competitividad de la Liga Profesional, sino que también recordó a los aficionados que en el fútbol, cada segundo cuenta, y que una buena actuación puede no ser suficiente si no se logra sostener la ventaja.

La historia y las estadísticas seguirán acumulándose mientras los equipos luchan por un lugar en la parte alta de la tabla.