El entrenador de Estudiantes, y yerno de Carlos Bianchi, celebra una exitosa gestión con la conquista de múltiples títulos desde 2023.

Eduardo Domínguez, conocido en el ámbito futbolístico como "Barba", ha dado un notable giro en su carrera como entrenador en Estudiantes desde que asumió en 2023. Su recorrido, aunque comenzó en Vélez, está marcado por triunfos significativos y un enfoque en la construcción de un proyecto sólido y a largo plazo.

Es yerno de Carlos Bianchi, el célebre director técnico que sigue siendo una leyenda en el fútbol argentino.

Ambos, aunque con trayectorias diferentes, comparten raíces en Liniers.

La relación entre Domínguez y la dirigencia de Vélez se tornó conflictiva, lo que motivó su salida del club.

Sin embargo, su camino como estratega se consolidó cuando se unió a las filas de Estudiantes, donde ha estado trabajando arduamente hasta hoy.

Recientemente, dio un gran paso al llevar al equipo a la conquista del Trofeo de Campeones en Santiago del Estero, lo que le permitió extender su contrato con el club hasta finales de 2024.

El desempeño de Domínguez en Estudiantes es impresionante.

Ha disputado cuatro finales y ha ganado tres de ellas, superando así a entrenadores renombrados como Alejandro Sabella y Carlos Bilardo.

Con un total de cinco títulos en su carrera, sus logros lo acercan cada vez más a la marca de su suegro, que consiguió seis trofeos entre 1993 y 1996. A pesar de no tener la misma estabilidad en el contexto de los clubes que dirigió, Domínguez ha demostrado su capacidad para adaptarse y triunfar en diferentes entornos.

Además, es importante mencionar que durante su carrera, el técnico acumuló otros títulos, comenzando con la Supercopa Uruguaya en 2019, mientras dirigía a Nacional.

A esto se suma la Copa de la Liga Profesional que ganó con Colón en 2021. Aunque tuvo dificultades en Independiente, encontró su hogar en Estudiantes, consolidándose como un referente en el club.

A través de sus triunfo, Domínguez ha logrado establecerse como uno de los pocos técnicos en la Liga Profesional que dirige un proyecto a largo plazo.

Su enfoque incluye no sólo la obtención de resultados, sino también el desarrollo de juveniles, mostrando una visión a futuro que incluye la integración de nuevos talentos en el primer equipo.

Durante su trabajo en Estudiantes, Domínguez ha tenido que adaptarse y enfrentarse a desafíos significativos, incluyendo la inminente salida de jugadores clave en 2025 como Enzo Pérez y Federico Fernández, lo que lo obliga a buscar nuevas incorporaciones y potenciar a los jugadores más jóvenes.

Además de su capacidad táctica, una de las características que distinguen a Domínguez es su apertura sobre las enseñanzas que ha recibido de Bianchi.

A menudo menciona la importancia de ser auténtico y desarrollar su propio estilo, en lugar de simplemente replicar lo que ha visto o aprendido.

En sus propias palabras, "No estoy todo el día con los jugadores.

No sé qué pasa por tu cabeza: tenés que ser vos mismo".

En esta etapa de su carrera, Domínguez continúa escribiendo una historia que lo consolida como uno de los directores técnicos más prometedores en el fútbol argentino, y su labor en Estudiantes es prueba de ello, mientras se enfrente al desafío de seguir cosechando éxitos en un entorno competitivo.