El emblemático mediocampista español Andrés Iniesta se despidió del fútbol profesional en un emotivo acto en Barcelona, reflexionando sobre su carrera y su vida.

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El destacado mediocampista español Andrés Iniesta, de 40 años, se despidió del fútbol profesional este fin de semana en una conmovedora ceremonia que tuvo lugar en el antiguo cine IMAX del Port Vell de Barcelona.

Ante una multitud de familiares, amigos y seguidores, Iniesta compartió su emoción y nostalgia al cerrar un capítulo significativo de su vida, una etapa que comenzó en su infancia en la pequeña localidad de Fuentealbilla, donde nació con el sueño de convertirse en futbolista.

"Nunca pensé que llegaría este día", expresó Iniesta entre lágrimas de emoción y orgullo.

"Estas lágrimas representan el sueño de aquel niño que trabajó arduamente para hacer realidad su anhelo.

No son lágrimas de tristeza, sino de satisfacción por haber alcanzado lo que siempre deseé", añadió.

Recordando su recorrido, Iniesta atribuyó gran parte de su éxito a su familia, quienes siempre fueron su soporte incondicional.

"Mi familia ha sido mi motor y fortaleza.

Es un honor contar con la presencia de mis generaciones familiares aquí hoy", destacó Iniesta, haciendo énfasis en el papel crucial que jugaron sus padres y su hermana en su vida.

"Sin el apoyo de mi padre, no habría llegado tan lejos.

Él ha sido mi inspiración constante", añadió.

El jugador también hizo mención de su paso por La Masía, el centro de formación del FC Barcelona, un lugar que considera fundamental en su desarrollo personal y profesional.

"La Masía me cambió para siempre, me enseñó los valores que necesito en la vida.


Agradezco a todos mis profesores y compañeros que han formado parte de este viaje", comentó Iniesta.

El futbolista revivió momentos significativos de su carrera, desde su debut en el primer equipo de Barcelona hasta sus contribuciones a la selección española, con la que vivió una de las etapas más gloriosas del fútbol nacional.

"La selección es parte de mí, he tenido la suerte de vivir épocas doradas junto a colegas que han estado a mi lado desde que era un niño", recordó.

Iniesta no solo hizo alusión a sus éxitos en el campo, sino que también mencionó la profunda conexión que tuvo con el FC Barcelona, especialmente durante los años de Pep Guardiola como director técnico, periodo que considera el más memorable de su vida.

"No se puede hablar de mi carrera sin mencionar a Guardiola, quien me dio la oportunidad de alcanzar mi máximo potencial", puntualizó.

Al concluir su discurso, Iniesta dejó claro que aunque su etapa como jugador ha terminado, su amor por el fútbol perdurará. "El fútbol no se acaba aquí. Estoy comprometido a seguir formándome y contribuyendo a este deporte en otras facetas, como entrenador y en proyectos con academias", explicó. Con agradecimiento en su voz, Iniesta culminó su despedida afirmando que su paso por el fútbol lo ha dejado lleno de orgullo.

"Pelear hasta el final y recordar los momentos vividos es lo que me llena de felicidad".