La selección india perdió 0-2 frente a Tailandia en un amistoso que revela sus debilidades antes de enfrentarse a su crucial partido de clasificación para el Asia Cup. Los goles de Benjamin Davis y Poramet Arjvilai marcaron la diferencia en un encuentro dominado por la selección tailandesa en el estadio de Thammasat.

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El pasado miércoles, en un encuentro amistoso disputado en el estadio de Thammasat en Pathum Thani, Tailandia, la selección india sufrió una derrota que pone en duda su preparación de cara a los próximos compromisos en la clasificación para el Asia Cup.

El marcador final fue de 2-0 a favor del equipo local, con goles de Benjamin Davis en el minuto 8 y Poramet Arjvilai en el minuto 59. Este resultado contrasta con el historial reciente entre ambos equipos, ya que India había vencido en sus dos enfrentamientos anteriores, incluyendo una victoria 4-1 en la Copa Asiática de 2019 y un 1-0 en la Kings Cup de ese mismo año.

El partido, que formaba parte de la preparación de ambas selecciones para los próximos encuentros de clasificación, sirvió como un claro recordatorio de las áreas en las que India debe mejorar.

La selección india, actualmente ubicada en la posición 127 del ranking mundial de la FIFA, mostró un rendimiento por debajo de sus expectativas, enfrentándose a una Tailandia, que ocupa la posición 99 en el ranking, y que dominó gran parte del encuentro.

El capitán Sunil Chhetri, una figura emblemática del fútbol indio y reconocido por su liderazgo y goles en competencias internacionales, tuvo una oportunidad importante en el minuto 24, cuando su remate de cabeza fue detenido por el portero tailandés Saranon Anui.

Chhetri, que en 2019 anotó dos veces contra Tailandia en la Copa Asiática, busca seguir siendo una pieza clave para la selección india en sus próximos desafíos.

Históricamente, la selección india ha mostrado un progreso constante en los últimos años, alcanzando hitos como la clasificación para la Copa Asiática y la mejora en su posición en el ranking mundial.

Sin embargo, esta derrota evidencia que todavía hay mucho por mejorar, especialmente en aspectos defensivos y en la consistencia del rendimiento.

Para India, el próximo desafío es el partido de clasificación contra Hong Kong, programado para el 10 de junio en Kowloon. La victoria en ese encuentro sería crucial para asegurar un lugar en la fase final del torneo continental. Por su parte, Tailandia también se prepara para su enfrentamiento contra Turkmenistán en la ronda final de clasificación, buscando mantener su buen rendimiento y avanzar en el torneo.

Este tipo de amistosos son fundamentales para que las selecciones ajusten estrategias y evalúen a sus jugadores. En el caso de India, la derrota debe servir como una llamada de atención para fortalecer su preparación y corregir errores antes de enfrentarse a rivales de mayor nivel en la competencia oficial.

La expectativa es que, con el tiempo y la experiencia adquirida, la selección india pueda alcanzar el nivel esperado y competir de igual a igual en el escenario internacional, especialmente en un torneo tan importante como el Asia Cup.