El profe Fernando Signorini tiene claro cuáles fueron los días más especiales compartidos con Diego Maradona.

Aquella mini pretemporada en el campo El Marito de La Pampa, ubicado a 60 kilómetros de Santa Rosa, se convirtió en un hito en la preparación del 10 para el Mundial de Estados Unidos.

Signorini recuerda la elección de aquel lugar por su intimidad y contacto con la naturaleza, lejos de lujos y excesos.

Diego había conocido el campo a través de un conocido durante unas vacaciones en Coronel Dorrego y decidieron organizar allí la preparación.

Los diez días en La Pampa tenían un objetivo claro: llegar en óptimas condiciones al Mundial, especialmente para la segunda fase.

Sin embargo, la sanción que lo dejó fuera de la competencia cambió los planes.

En la rutina de Maradona se incluían ejercicios aeróbicos por la mañana, rutinas de gimnasia por la tarde, boxeo, ejercicios en un gimnasio y natación, todo supervisado por el doctor Néstor Lentini.

Se cuidaba al máximo la intimidad del crack, permitiendo solo la presencia de invitados selectos.

Durante su estancia en La Pampa, Maradona se mostró relajado, disfrutando de actividades familiares como los asados, y también empresariales, con la presencia de un camarógrafo documentando sus pasos.

La solidaridad y empatía del 10 también dejaron huella en aquellos días, como cuando visitó una escuela-hogar en Santa Rosa.

Los casi diez días en La Pampa se convirtieron en un tema de conversación por siempre, siendo analizados en 'Diegologías', un curso que comenzará la próxima semana.

Signorini, junto a periodistas, investigadores y poetas, serán los encargados de reflexionar sobre Maradona y su historia.