El conjunto de Lanús conquistó una victoria por 2-0 en un encuentro complejo contra Huracán, marcado por lesiones, penales fallidos y decisiones polémicas, avanzando a cuartos del torneo argentino.

El partido, disputado en la cancha de Quilmes, estuvo lleno de imprevistos, decisiones controvertidas y un espíritu de lucha que mantuvo en vilo a los espectadores.
Desde el inicio, el entrenador de Lanús, Mauricio Pellegrino, se vio obligado a hacer cambios inesperados. Marcelino Moreno, pieza clave en el esquema granate, sufrió una lesión en el calentamiento, lo que obligó a su reemplazo por Dylan Aquino. Además, Felipe Peña Biafore abandonó el campo a los 29 minutos por una lesión en su pierna y fue reemplazado por Agustín Medina. Estas bajas, sumadas a una primera mitad muy cerrada y poco clara para el equipo local, hicieron que #Lanús jugara en los primeros 45 minutos con cierta inseguridad y sin poder imponer su ritmo.
Por su parte, Huracán, dirigido por Frank Kudelka, aprovechó esa incertidumbre para generar ocasiones peligrosas, principalmente con Matko Miljevic y Matías Tissera en la ofensiva.
Sin embargo, ni la precisión en sus remates ni las buenas respuestas del arquero Nahuel Losada lograron vulnerar la portería de Lanús en esa primera parte.
El cambio de escenario llegó en el segundo tiempo. El conjunto granate mostró mayor concentración y resolución. La apertura del marcador ocurrió tras una jugada que a simple vista pareció polémica. El árbitro Sebastián Zunino sancionó una falta fuera del área sobre Nervo, pero en realidad la infracción ocurrió dentro del área. Sasha Marcich tomó la ejecución del tiro libre con un disparo con rosca perfecta que eludió la barrera y se coló justo por debajo del ángulo izquierdo del arquero Sebastián Meza, desatando la euforia en los hinchas de Lanús.
Ese golazo al minuto 51 fue clave para definir el encuentro.
Lanús pudo ampliar la ventaja en una pena máxima a favor
Luego, Lanús pudo ampliar la ventaja en una pena máxima a favor. Eduardo Salvio fue quien tomó la responsabilidad, pero su disparo fue detenido por Sebastián Meza, que adivinó correctamente la dirección en el minuto 55.
La suerte parecía no estar del lado del conjunto granate, pero la seguridad volvió a aparecer en los pies de Aquino, quien recuperó la pelota tras un contraataque, eliminó a Nervo en el área y sacó un remate cruzado que dejó sin opciones al arquero de Huracán.
Con ese tanto, en los minutos finales, la diferencia en el marcador era definitiva.
El partido se complicó aún más cuando Ronaldo Dejesús y Luciano Giménez chocaron fuerte, teniendo que abandonar ambos el campo por lesiones. La adrenalina aumentó cuando Miljevic, en un acto de descontrol, agredió a un adversario con un cabezazo y patadas, acción que fue vista por el árbitro con tarjeta amarilla, aunque para muchos debió ser roja directa.
A pesar de los momentos tensos y algunas decisiones polémicas, el resultado final fue 2-0 a favor de Lanús, que ahora enfrentará en cuartos de final a Argentinos Juniors.
La victoria representó una muestra de carácter del conjunto local, que supo sobreponerse a las adversidades y mantener la diferencia en el marcador para avanzar en el torneo.
En la historia del fútbol argentino, estos encuentros están llenos de capítulos dramáticos y momentos que quedan en la memoria de los aficionados.
La Copa Argentina, torneo que ha tenido diferentes formatos desde su creación en 1969 y que ha sido una oportunidad para que clubes de distintas categorías puedan competir en igualdad, vuelve a demostrar que en el fútbol todo puede pasar, incluso en partidos llenos de polémicas y emociones.