La ciudad de Zaragoza se encuentra en plena ejecución de la reforma de la Avenida de Navarra, una obra significativa que abarca entre el Paseo Calanda y la calle Rioja.

Tras más de un mes desde su inicio, los trabajos se desarrollan a un ritmo acelerado, centrando esfuerzos en la renovación de las principales tuberías de saneamiento que se encuentran a más de cuatro metros de profundidad en el subsuelo.

La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, realizó una visita a la obra junto con el consejero de Urbanismo, Infraestructuras, Energía y Vivienda, Víctor Serrano, para supervisar de cerca el progreso de esta importante intervención.

En esta fase inicial, los trabajos están centrados en la calzada norte, donde se están llevando a cabo las tareas de renovación de infraestructuras.

Una vez concluidas las instalaciones subterráneas, se procederá a la construcción de nuevas aceras y se comenzará a diseñar un nuevo paseo arbolado.

Chueca destacó que este segmento de la avenida incluirá más de 2.300 metros cuadrados destinados a áreas verdes y espacios comunitarios, inspirados en el éxito de la primera fase del proyecto.

La intervención añadirá 145 árboles, más de 1.400 plantas de diferentes especies y 92 bancos, con el objetivo de transformar la Avenida de Navarra en un lugar más acogedor y revitalizar el comercio local.

El plazo proyectado para concluir esta fase de obras es hasta finales de marzo del próximo año.

Posteriormente, se abordará la reforma de la calzada y acera sur, que incluirá la instalación de nuevos equipamientos, tales como un área de ejercicios para personas mayores y un pequeño parque infantil.

La zona destinada a mayores estará ubicada junto al Paseo de Calanda, contigua a una residencia de la tercera edad, equipada con elementos que favorecerán la movilidad de sus usuarios.

La parte infantil se situará frente al centro cívico Delicias, adaptándose a las dimensiones de la banda verde.

La tercera y última fase de la reforma se enfocará en la rotonda de la calle Rioja, donde se realizarán conexiones de algunas tuberías importantes, modificaciones en el carril bici y ampliaciones de aceras para mejorar la accesibilidad y la seguridad.

Uno de los objetivos primordiales de esta reforma es mejorar la seguridad vial en la zona.

Chueca mencionó que, a diferencia de la primera fase, en este nuevo tramo las intersecciones con las calles adyacentes estarán elevadas, garantizando así una continuidad en las aceras, priorizando a los peatones y obligando a los vehículos a reducir la velocidad.

La calzada contará con dos carriles de circulación en ambos sentidos y se establecerá un carril bici segregado de doble sentido, en línea con las mejoras implementadas durante la primera fase de la Avenida de Navarra y el Paseo Calanda.

Dentro de esta misma lógica de transformación urbana, la alcaldesa comunicó que la obra de la Avenida de Cataluña también se iniciará pronto, con la construcción de una nueva rotonda bajo el puente del ferrocarril, una intervencion que requiere una inversión cercana a 1,1 millones de euros, complementando los 4,4 millones de euros invertidos en la primera fase de su reforma finalizada en febrero.

El conjunto de estas reformas demuestra el compromiso del Gobierno de Zaragoza para llevar a cabo proyectos estratégicos que mejoren la calidad de vida de sus ciudadanos, centrándose en crear espacios más sostenibles y accesibles en la ciudad.