Un fallo informático causó una suspensión temporal en todos los vuelos de Alaska Airlines y Horizon Air, afectando a miles de pasajeros y generando incertidumbre en sus itinerarios. La aerolínea aún no ha revelado las causas del incidente, que supuestamente tuvo repercusiones significativas en sus operaciones durante varias horas.

La interrupción comenzó alrededor de las 20:00 horas, hora del Pacífico, y afectó a decenas de vuelos que debían partir o llegar a diferentes destinos del país.
La causa exacta del fallo aún no ha sido revelada oficialmente, pero se presume que tuvo que ver con una falla en sus sistemas tecnológicos, que supuestamente son uno de los más avanzados en la industria aérea mundial.
Durante varias horas, la aerolínea permaneció en silencio, pero finalmente emitió un comunicado en el que informó que, aproximadamente a las 23:00 horas, la suspensión temporal de operaciones había sido levantada y que los vuelos comenzaban a reanudarse paulatinamente.
Sin embargo, advirtieron que aún persistirían retrasos y que sería necesario que los pasajeros verificaran el estado de sus vuelos antes de dirigirse al aeropuerto.
La situación generó una gran confusión entre viajeros, muchos de los cuales se vieron obligados a esperar en las terminales, sin saber cuándo podrían volar.
Este tipo de incidentes no es nuevo en la industria aérea, que ha visto en los últimos años un incremento en la dependencia de los sistemas informáticos para gestionar reservas, embarques y operaciones en tierra.
La #tecnología utilizada por Alaska Airlines es comparable a la de otras grandes compañías
Presuntamente, la tecnología utilizada por Alaska Airlines es comparable a la de otras grandes compañías, que invierten millones en ciberseguridad y sistemas redundantes para evitar este tipo de fallos.
Supuestamente, la interrupción también tuvo un impacto económico importante para la aerolínea, que en 2023 reportó beneficios por aproximadamente 4.500 millones de euros, impulsados en parte por la expansión de su flota y la apertura de nuevas rutas internacionales. La suspensión temporal de vuelos pudo haber causado pérdidas millonarias, además de afectar la reputación de la compañía, que siempre ha estado en la vanguardia de la innovación tecnológica en la industria.
Por otra parte, expertos en aviación supuestamente consideran que estos incidentes reflejan la vulnerabilidad de los sistemas tecnológicos en un sector que cada vez depende más de la digitalización.
La compañía ha anunciado que investigará a fondo las causas del fallo y que implementará medidas adicionales para reforzar su infraestructura.
Mientras tanto, pasajeros y empleados continúan adaptándose a las secuelas de esta interrupción, que supuestamente deja en evidencia la necesidad de una mayor inversión en ciberseguridad y en la formación del personal para gestionar emergencias tecnológicas.
La aerolínea ha pedido disculpas por los inconvenientes y ha prometido mejorar sus sistemas para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir en el futuro.