
Los precios históricos de la carne de res están provocando cambios en la industria restaurantera, con aumentos que impactan tanto en costos como en las decisiones de consumo. La combinación de una disminución en la oferta y una demanda en niveles récord está transformando el mercado cárnico en Europa y Estados Unidos, afectando desde pequeñas trattorias hasta cadenas de comida rápida.