El Ayuntamiento de Valencia realiza reparaciones en calles clave para la Ofrenda de flores, asegurando la seguridad y accesibilidad para todos los asistentes.
El Ayuntamiento de Valencia ha puesto en marcha una campaña de reparaciones en las aceras y calzadas de diversas calles de la ciudad, en preparación para la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados, que se llevará a cabo los días 17 y 18 de marzo.
Este evento, uno de los más esperados dentro de las festividades de las Fallas, atraerá a una gran cantidad de participantes, turistas y visitantes, lo que hace indispensable que el estado de las vías sea óptimo.
El concejal de Urbanismo, Juan Giner, ha destacado la importancia de mantener las calles en excelentes condiciones, no solo para la seguridad vial, sino también para garantizar la accesibilidad de los peatones que se congregarán para rendir homenaje a la patrona de Valencia.
"Estamos comprometidos con la seguridad y el bienestar de todos los asistentes a este evento", ha afirmado Giner.
En total, el Ayuntamiento ha identificado 21 puntos en los que se realizarán reparaciones, abarcando calles emblemáticas como la Calle Guillem de Castro, el Paseo Ciutadela y la Plaza dels Furs.
Esta acción forma parte de un esfuerzo más amplio para mantener y mejorar la infraestructura urbana de la ciudad y sus pedanías. Las calles que recibirán atención incluyen lugares como la Calle Don Juan de Austria, la Avenida Navarro Reverter y la Plaza Alfons el Magnànim, entre otros.
Históricamente, la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados es uno de los actos más arraigados en la cultura valenciana. Desde hace más de un siglo, las comisiones falleras se visten con trajes tradicionales y desfilan por las calles, llevando consigo enormes ramos de flores que son ofrecidos a la Virgen en un gesto de devoción y agradecimiento.
Este ritual no solo representa la conexión de la comunidad con sus tradiciones, sino que también destaca el papel central que desempeñan las Fallas en la identidad cultural de la ciudad.
La importancia de este evento ha llevado al consistorio a priorizar la mejora de las infraestructuras viales. Según datos recientes, la Ofrenda atrae a más de 200.000 personas cada año, lo que resalta la necesidad de que las calles estén en perfectas condiciones para soportar el flujo de visitantes. Las reparaciones incluyen el arreglo de baches, el repintado de señales y la adecuación de las aceras para asegurar que todos, incluidos aquellos con movilidad reducida, puedan disfrutar de este evento.
En resumen, la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados no solo es una celebración de la fe, sino también un momento en el que la ciudad de Valencia muestra su mejor cara.
Con estas mejoras en las infraestructuras, el Ayuntamiento espera que tanto los valencianos como los turistas puedan disfrutar de la festividad sin contratiempos.
La Ofrenda, que simboliza la unidad y el amor por la cultura local, se convierte así en un motivo más para que la ciudad se vista de gala y reciba a todos con los brazos abiertos.