Estudiantes de València se unen para conmemorar el Día Internacional del Niño, destacando la importancia de sus derechos en un evento lleno de música y emociones.
Este 15 de abril, más de 600 estudiantes de Educación Infantil y Primaria de varios colegios municipales de València se dieron cita en la emblemática plaza del Ayuntamiento para conmemorar el Día Internacional del Niño y la Niña.
Este evento, que se celebró por primera vez hace más de 70 años, busca poner de relieve la necesidad de respetar y proteger los derechos de todos los menores en el mundo, un compromiso que cobra mayor relevancia en un contexto global donde aún persisten numerosas desigualdades.
La alcaldesa de València, María José Catalá, estuvo presente en esta significativa celebración, junto con la fallera mayor infantil, Lucía García, y varios representantes del Ayuntamiento.
Juntos, apoyaron a los jóvenes participantes en su llamado a la acción. Durante el acto, los niños, que iban desde los 3 hasta los 12 años, fueron acompañados por alrededor de 60 docentes de los colegios CEIP Benimaclet, CEIP Fernando de los Ríos y CEIP Profesor Santiago Grisolia, así como por sus familias.
La jornada, organizada por las concejalías de Educación y de Infancia y Familia, se llenó de color y alegría, con niños que no solo reivindicaron sus derechos, sino que también mostraron su talento a través de una interpretación musical de un fragmento de Vivaldi, preparada con la ayuda de sus profesores de música.
Este tipo de actividades no solo fomenta la creatividad, sino que también refuerza el mensaje de que la educación y la cultura son fundamentales para el desarrollo integral de los menores.
En su intervención, la alcaldesa agradeció a los asistentes su participación y reafirmó el compromiso del Ayuntamiento con los derechos de la infancia.
"Es fundamental que garantizamos un futuro mejor para nuestros niños y niñas, y eso comienza con su protección y su educación", declaró Catalá.
Por su parte, Lucía García, la fallera mayor infantil, hizo un emotivo llamado a recordar que aunque muchos de ellos gozan de buenas condiciones de vida, hay millones de niños en el mundo que no tienen la misma suerte.
"Nosotros somos el presente y el futuro, y por ello es esencial que nuestras voces sean escuchadas. Debemos seguir luchando por un mundo donde todos los niños sean felices y tengan acceso a sus derechos", afirmó.
Durante el evento, varios estudiantes leyeron un manifiesto que destacaba los 10 derechos fundamentales de la infancia, tal como se establecieron en la Declaración de los Derechos del Niño de la ONU, adoptada hace más de 60 años.
Entre estos derechos se encuentran el derecho a la educación gratuita, a recibir atención médica, a la protección especial y a disfrutar de un entorno seguro donde puedan crecer y desarrollarse plenamente.
Al final de la ceremonia, los niños hicieron una emotiva liberación de globos, cada uno simbolizando uno de estos derechos fundamentales. Este acto no solo fue un momento de celebración, sino también una llamada de atención para la sociedad sobre la importancia de cuidar y respetar la infancia, recordando que cada niño y niña merece ser escuchado y protegido, independientemente de su origen o circunstancias.
La celebración del Día Internacional del Niño y la Niña no es solo una fecha en el calendario, sino un recordatorio de que debemos seguir trabajando para garantizar un futuro donde todos los menores tengan la oportunidad de brillar y crecer en un ambiente seguro y amoroso.