El Ayuntamiento de València continúa cumpliendo con su compromiso de pagar a los proveedores en un tiempo récord, superando los plazos establecidos por la ley.

El Ayuntamiento de València ha demostrado una notable eficiencia en su gestión financiera al reducir el tiempo de pago a sus proveedores a tan solo 22,67 días durante el mes de marzo de 2025.

Esta cifra, que se mantiene muy por debajo del límite legal de 30 días, refleja el compromiso de la administración local de asegurar que las empresas y servicios que colaboran con la ciudad reciban sus pagos de manera oportuna.

La concejala de Hacienda y Presupuestos, María José Ferrer San Segundo, ha subrayado la importancia de esta cifra, destacando que es un claro indicativo de la buena gestión que se está llevando a cabo en el Ayuntamiento.

En su intervención en la Junta de Gobierno Local, celebrada este jueves, Ferrer San Segundo señaló que esta tendencia positiva no solo beneficia a los proveedores, sino que también refleja un compromiso con la transparencia y la responsabilidad fiscal.

Históricamente, la gestión de los plazos de pago por parte de las administraciones públicas ha sido un tema delicado en España. En épocas anteriores, muchas entidades enfrentaban críticas por demoras en los pagos, lo que generaba problemas financieros para numerosas pequeñas y medianas empresas.

Sin embargo, desde la implementación de leyes más estrictas y la mejora de los procesos administrativos, se ha logrado avanzar en este aspecto.

El hecho de que el Ayuntamiento de València haya conseguido mantener su Periodo Medio de Pago (PMP) en 22,67 días, sumando todos los organismos públicos locales, es un reflejo de la eficacia de las políticas adoptadas por el equipo de gobierno que lidera la alcaldesa María José Catalá.

Esta situación es especialmente relevante en el contexto actual, donde muchas empresas han visto afectadas sus operaciones debido a la crisis económica provocada por la pandemia de COVID-19 y otros factores globales.

La primera teniente de Alcaldía ha enfatizado que es una prioridad para el gobierno local garantizar que los proveedores reciban sus pagos con la mayor celeridad posible.

Este enfoque no solo fortalece las relaciones comerciales entre el Ayuntamiento y las empresas locales, sino que también contribuye a la estabilidad económica de la región.

Los pagos a tiempo permiten que los proveedores mantengan un flujo de caja saludable, lo que a su vez se traduce en la posibilidad de reinvertir en sus negocios y generar empleo.

Es importante mencionar que, en comparación con otras ciudades de España, València se posiciona favorablemente en cuanto a la gestión de pagos. Esta eficiencia no solo se traduce en beneficios económicos, sino que también promueve un clima de confianza entre el sector público y privado.

Con la llegada de nuevas tecnologías y la digitalización de procesos, el Ayuntamiento continúa explorando maneras de optimizar aún más su gestión financiera y garantizar que los tiempos de espera para los proveedores sigan disminuyendo.

En un entorno donde la celeridad y la transparencia son cada vez más valoradas, el Ayuntamiento de València se perfila como un modelo a seguir para otras administraciones públicas.