Este año se conmemora medio siglo del histórico Acuerdo de Willowbrook, un hito en la lucha por los derechos de las personas con discapacidad en Estados Unidos. La celebración destaca los avances logrados y los desafíos pendientes en la inclusión comunitaria y el respeto a la dignidad.

Este año se conmemora el 50º aniversario del Acuerdo de Willowbrook, un evento que marcó un antes y un después en la historia de los derechos de las personas con discapacidad en Estados Unidos.

La ceremonia, organizada por la Oficina para Personas con Discapacidades del Estado de Nueva York, en colaboración con instituciones académicas y organizaciones de defensa, tuvo lugar en Staten Island y reunió a autoridades, familiares, activistas y expertos en la materia.

El evento, titulado “La evolución de la inclusión 1975 – 2025”, rememoró los hechos históricos que llevaron a la firma del acuerdo en 1975, tras una demanda colectiva presentada en 1972 por padres y defensores de derechos, que denunciaban condiciones inhumanas en la antigua escuela estatal de Willowbrook.

La escuela, ubicada en Staten Island, había sido durante décadas símbolo de negligencia y abusos, siendo conocida por sus condiciones deplorables y por un controvertido estudio médico en el que niños fueron infectados con hepatitis para investigar posibles tratamientos.

El caso de Willowbrook fue impulsado por la valentía de padres como Willie Mae Goodman, quien luchó incansablemente por los derechos de su hija Margaret, residente en la institución.

En reconocimiento a su lucha, se instauró el Premio Willie Mae Goodman a la Defensa Familiar, otorgado anualmente a familias que defienden los derechos de sus seres queridos con discapacidad.

Otro acto destacado fue la entrega del Premio Bernard Carabello a la valentía de aquel padre que permitió a reporteros, incluyendo a Geraldo Rivera, ingresar a la escuela y documentar las condiciones inhumanas.

Sus esfuerzos contribuyeron a generar una conciencia nacional que impulsó cambios legislativos y de políticas públicas.

La firma del Acuerdo de Willowbrook representó un punto de inflexión en la historia social y política del país. Este compromiso estatal, impulsado por el gobernador Hugh Carey, estableció la obligación de cerrar las instituciones y promover la integración de las personas con discapacidad en la comunidad, fomentando residencias y servicios centrados en la persona.

Para 1987, la escuela de Willowbrook fue cerrada y se cerraron otras 19 instituciones a lo largo del estado.

El movimiento que surgió a partir de estos hechos fue fundamental para la creación de leyes y órganos especializados, como la Oficina para Personas con Discapacidades, que hoy continúa trabajando para ampliar las oportunidades y apoyar a quienes enfrentan barreras sociales y estructurales.

En el marco de la celebración, también se anunció la propuesta presupuestaria para 2025-2026 del gobierno estatal, que incluye la creación del Centro de Aprendizaje de Willowbrook, con una inversión de aproximadamente 70 millones de euros.

Este centro se ubicaría en un antiguo edificio en el campus del Instituto de Investigación Básica y busca honrar la historia y el legado de la lucha por la deinstitucionalización.

Además, la historia de Willowbrook se vincula con la fundación de The Arc New York en 1950, la organización más grande del estado dedicada a apoyar y defender a las personas con discapacidad.

En su 75º aniversario, recién celebrados, donaron sus archivos históricos al College of Staten Island, que ahora preserva y comparte estos documentos para educar y promover la memoria de los avances y desafíos en los derechos civiles.

Expertos y líderes políticos, entre ellos la presidenta del Senado estatal Jessica Scarcella-Spanton y la asambleísta Charles Fall, destacaron que aunque se han logrado avances significativos, aún queda mucho por hacer para garantizar la plena inclusión y dignidad de todas las personas con discapacidad.

La alcaldesa de Nueva York, David Carr, enfatizó que la protección y respeto de los derechos de las personas con discapacidades deben seguir siendo una prioridad constante.

El fiscal del condado de Richmond, Michael E. McMahon, subrayó la importancia de recordar y honrar los esfuerzos que condujeron a la creación del acuerdo, así como la inversión en proyectos que preservan la historia de Willowbrook.

Desde Staten Island, el presidente de la Corporación de Desarrollo Económico, Mike Cusick, resaltó el valor de la valentía y el compromiso de las familias y activistas que lograron cerrar la institución y promover un cambio social profundo.

El gobierno también anunció que en los próximos años se construirá un centro dedicado a la historia de Willowbrook, que permitirá futuras generaciones conocer los errores del pasado y aprender de ellos para construir una sociedad más justa e inclusiva.

La memoria de Willowbrook, que en su momento fue símbolo de negligencia, ahora representa un ejemplo de movilización y lucha por los derechos civiles, la dignidad y la igualdad.

En definitiva, la conmemoración de los 50 años del Acuerdo de Willowbrook no solo es un acto de rememoración, sino también un llamado a la acción para seguir avanzando hacia una sociedad en la que todas las personas puedan vivir con dignidad, participación y respeto en sus comunidades.