La industria tecnológica está viendo un cambio significativo, con muchas marcas de laptops trasladando su producción a India debido a nuevas políticas comerciales y beneficios fiscales del gobierno indio.

En un movimiento que refleja la creciente influencia de India en la industria tecnológica mundial, varias marcas de laptops están comenzando a trasladar su producción desde China hacia tierras indias.

Este cambio ha sido impulsado por una serie de factores económicos, políticos y estratégicos que han llevado a las empresas a reconsiderar sus cadenas de suministro.

Recientemente, el gobierno indio impuso un arancel del 12% sobre ciertos productos importados desde China, con la intención de reducir las importaciones baratas y fortalecer la fabricación local.

Este anuncio coincidió con la postura de Estados Unidos en el marco de la guerra comercial que mantiene con China, generando un entorno de incertidumbre para los productores internacionales.

Una de las principales razones que ha motivado esta migración es el esquema de incentivos conocido como PLI (Production Linked Incentive), que ofrece beneficios económicos a las empresas que establecen o expanden su producción en India.

Con un fondo de aproximadamente 2.2 billones de rupias indias, equivalentes a unos 26 mil millones de euros, este programa busca promover la fabricación local en sectores clave, incluyendo la electrónica y la tecnología.

Desde su lanzamiento en 2020, el esquema ha tenido un impacto positivo, atrayendo a numerosos fabricantes internacionales que buscan aprovechar los beneficios fiscales y la mano de obra calificada en India.

Además, el programa ha contribuido a que India se convierta en un centro estratégico para la producción de dispositivos electrónicos, compitiendo con China, que durante décadas ha sido el principal fabricante mundial.

El movimiento también forma parte de la estrategia más amplia del gobierno indio, conocida como 'Make in India', que busca fomentar una economía más autosuficiente y reducir la dependencia de importaciones extranjeras.

La iniciativa ha tenido un respaldo considerable del sector privado, que ve en esta política una oportunidad para diversificar sus cadenas de suministro y acceder a un mercado interno en expansión.

Históricamente, India ha sido un importante productor de tecnología, aunque en las últimas décadas su papel se vio desplazado por China y otros países asiáticos.

Sin embargo, con la implementación de estas nuevas políticas y la inversión en infraestructura, el país aspira a recuperar su protagonismo en el sector tecnológico.

El cambio en la manufactura de laptops también ha tenido repercusiones en la economía local, generando nuevas oportunidades de empleo y promoviendo la transferencia de tecnología.

Empresas como Dell, HP y Lenovo ya han anunciado planes para ampliar su presencia en India, estableciendo fábricas y centros de investigación y desarrollo.

En conclusión, la migración de marcas de laptops a India no solo refleja un cambio en las cadenas de suministro globales, sino que también evidencia cómo las políticas gubernamentales pueden influir decisivamente en la reconfiguración del mercado internacional.

A medida que India continúa impulsando su sector tecnológico, se espera que más empresas sigan su ejemplo, consolidando su posición en la economía mundial.