Tras meses de investigación, se identifican los restos de un adolescente desaparecido hace casi 40 años en la vivienda de Gustavo Cerati, en medio de un misterio que ha conmovido a la comunidad argentina.
Este miércoles, se hizo pública la identidad de la persona cuyos restos óseos fueron encontrados en la propiedad del legendario cantante Gustavo Cerati, en el barrio de Coghlan, Buenos Aires.
Después de varios meses de investigación, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) logró confirmar que se trata de Diego, un joven de 16 años que desapareció el 26 de julio de 1984, hace casi 40 años.
La propiedad en cuestión, que Gustavo Cerati habitó entre 2001 y 2003, fue el escenario de este hallazgo que ha despertado una gran conmoción en la comunidad local y en el mundo del espectáculo.
Los restos fueron descubiertos el pasado 20 de mayo, durante trabajos de construcción en el terreno. Los obreros que realizaban las obras encontraron en una división de la propiedad un conjunto de huesos distribuidos en diferentes sobres de madera, en una fosa pequeña de aproximadamente 1,2 metros de largo, 60 centímetros de ancho y 40 centímetros de profundidad.
Según información proporcionada por medios argentinos, se hallaron un total de 151 restos óseos, además de otros objetos como un fragmento de tela, un reloj Casio con calculadora, una llave con su llavero, un fragmento metálico que supuestamente sería una moneda japonesa de 5 yenes, y una etiqueta de prenda de vestir.
Para confirmar la identidad, el EAAF tomó muestras de ADN de la madre del joven, cuyos resultados coincidieron con los restos hallados, permitiendo así su identificación.
La historia de Diego, cuyo apellido se mantiene en reserva para proteger su privacidad, es particularmente impactante. Se supo que, en 1984, Diego había regresado del colegio al mediodía para almorzar con su madre. Posteriormente, le pidió dinero para reunirse con un amigo, pero nunca volvió a su hogar. Cuando pasaron las 20:30 horas, sus padres, preocupados por su desaparición, denunciaron el caso en la comisaría. Sin embargo, en ese momento, las autoridades no quisieron tomar la denuncia, argumentando que se trataba de un caso de fuga de hogar.
El caso de Diego fue ampliamente difundido en medios de comunicación argentinos. En 1986, dos años después de su desaparición, su padre, Juan, declaró a la revista ¡Esto! que la policía había mencionado que tenía miles de casos similares y que, desde el principio, el caso fue catalogado como una fuga.
Además, expresó su frustración por la falta de investigación adecuada, asegurando que fue tratado como si ya estuvieran convencidos de que Diego se había ido por su propia voluntad, en lugar de buscar otras posibilidades, como un posible secuestro.
Supuestamente, algunos indicios sugieren que la muerte de Diego fue violenta. Fuentes no oficiales indican que el joven habría sido apuñalado en el pecho, con una herida que podría haber sido fatal. También, se rumorea que su cuerpo intentó ser desmembrado, lo que añade un nuevo nivel de misterio a la historia.
Este hallazgo ha abierto una nueva etapa en la investigación, que busca esclarecer las circunstancias exactas de su fallecimiento y las razones por las cuales sus restos permanecieron ocultos por casi cuatro décadas.
La historia de Diego, un adolescente desaparecido en los años 80 y encontrado en un lugar relacionado con uno de los íconos del rock argentino, continúa generando preguntas y despertando la atención de todo el país, que ahora mira hacia el pasado para entender qué sucedió realmente en aquella época y qué secretos guarda la casa de Gustavo Cerati.