Más de mil corredores se dieron cita en una jornada de deporte y solidaridad en La Coruña.

Más de mil personas participaron en la mañana de este domingo en la tercera edición de la Carreira Costa Ártabra, un evento deportivo que recorrió los municipios de Oleiros y La Coruña.

La competición, que abarcó una distancia de 10 kilómetros, se inició a las 9:30 horas en el castillo de Santa Cruz, en Oleiros, y culminó en el emblemático castillo de San Antón, en La Coruña.

Este evento ha demostrado ser un gran éxito tanto en participación como en organización.

Los vencedores de la prueba fueron Víctor Puyuelo en la categoría masculina y Karina Yevtushenko en la femenina. En el podio masculino, Puyuelo estuvo acompañado por Álvaro Presedo y Mikel Ocerín, mientras que en la categoría femenina, las tres primeras en cruzar la meta fueron Karina Yevtushenko, Lucía Fariña e Inés Iglesias.

La entrega de medallas se llevó a cabo en el paseo del Parrote, donde el concejal de Deportes, Manuel Vázquez, tuvo la oportunidad de felicitar a los ganadores.

Este evento no solo celebra el deporte y la competición, sino que tiene un propósito solidario. Todas las recaudaciones obtenidas a través de las inscripciones irán destinadas al Comité Antisida de La Coruña, conocido como Casco, que también estuvo a cargo de la organización del evento.

Manuel Vázquez, en su intervención, destacó: "Desde el Gobierno de Inés Rey apoyamos esta prueba y mostramos que somos una ciudad solidaria, además de fomentar hábitos de vida saludables a través de las carreras populares".

La Carreira Costa Ártabra ha sabido consolidarse en el calendario deportivo gallego desde su primera edición. Esta carrera se destaca no solo por su recorrido pintoresco a lo largo de la costa, sino también por el ambiente festivo que se genera en torno a ella.

Este año, además de la prueba principal de 10 kilómetros, se organizó otra carrera de una milla para aquellos que se inician en el mundo del running.

La historia de las carreras populares en Galicia se remonta a varias décadas atrás, convirtiéndose en un fenómeno que involucra a miles de personas cada fin de semana.

Estas competiciones no solo fomentan el deporte, sino que también crean un sentido de comunidad, donde los participantes se unen por una causa común y la convivencia.

La Carreira Costa Ártabra, por su parte, no solo ofrece un desafío físico, sino que también sirve como un recordatorio de la importancia de la solidaridad y del bienestar social.

Cada año, el evento atrae a nuevos participantes, motivados no solo por la competición sino también por la noble causa que lo respalda. La Coruña continúa siendo un referente en la celebración de eventos deportivos que combinan competición, cultura y solidaridad, consolidándose como una ciudad que se preocupa por el bienestar de su comunidad.