Un episodio sorprendente en el fútbol de Perú dejó a un jugador con graves lesiones tras un codazo que solo fue sancionado con una tarjeta amarilla, generando polémica en el torneo local.

En un hecho que ha causado revuelo en el fútbol peruano, un incidente insólito ocurrió durante el encuentro entre Cienciano y Alianza Universidad de Huánuco, disputado el pasado sábado 12 de abril en la jornada 8 del torneo de apertura de la máxima división del balompié incaico.

La acción, que podría haber tenido graves consecuencias, fue sancionada solo con una tarjeta amarilla por parte del árbitro, generando incredulidad entre los aficionados y expertos.

El suceso tuvo lugar aproximadamente a los 66 minutos de partido, cuando el delantero colombiano de Alianza, Yorleys Mena, y el defensor paraguayo Danilo Ortiz, se disputaban un balón en una jugada intensa.

En un intento por ganar la posición, Mena propinó un codazo de dura intensidad al paraguayo, quien quedó tendido en el césped tras el impacto. Las imágenes de la transmisión oficial mostraron claramente que Ortiz sangraba por la boca de inmediato, una señal evidente de la gravedad de la situación.

El personal médico del Cienciano acudió rápidamente para atender al jugador, quien parecía en estado de dolor y conmoción.

A pesar de la evidencia y del sangrado visible, el árbitro del encuentro, Ítalo González, solo decidió amonestar al atacante con una tarjeta amarilla.

Sorprendentemente, la revisión mediante el sistema de Video Asistencia Arbitral (VAR) no intervino para modificar la decisión, lo que generó una gran polémica en las redes sociales y entre los analistas deportivos.

El defensor paraguayo, que anteriormente había pasado por clubes como Santiago Wanderers en Chile y La Serena en su país, logró regresar a la cancha tras recibir atención, completando el partido en el que su equipo logró una victoria como visitante.

Sin embargo, la gravedad de la lesión no podía ser ignorada. Tras finalizar el encuentro, Ortiz fue trasladado a un centro médico donde los estudios confirmaron que tenía una doble fractura de mandíbula y la pérdida de tres dientes.

La lesión de Ortiz fue considerada de extrema gravedad, requiriendo dos cirugías reconstructivas en las horas siguientes. Los informes médicos detallaron que su recuperación podría extenderse aproximadamente a dos meses, lo que lo deja fuera de las canchas por un largo período.

El club Cienciano emitió un comunicado en el que expresaron su preocupación por la salud del jugador y confirmaron su ingreso a tratamiento especializado.

Este incidente no solo ha generado debate acerca de la dureza del fútbol peruano, sino también sobre la actuación de los árbitros ante acciones que podrían considerarse agresivas.

La falta de sanciones mayores en este caso ha reavivado las críticas hacia la toma de decisiones en los partidos y la necesidad de fortalecer los mecanismos de revisión en el arbitraje.

Históricamente, el fútbol en Perú ha sido escenario de momentos polémicos y jugadas extremas que han marcado su historia. Desde la famosa “Batalla de Lima” en los años 80 hasta episodios recientes, la pasión por el deporte suele ir acompañada de situaciones que desafían los límites, tanto en lo físico como en lo ético.

La lesión de Ortiz, en este contexto, se suma a una lista de episodios que resaltan la importancia de promover un juego más seguro y justo.

Mientras tanto, la comunidad futbolística y los seguidores del torneo continúan expresando su preocupación y exigiendo mayor responsabilidad y medidas preventivas para evitar que estas situaciones se repitan.

La lesión del paraguayo ha puesto en el centro de la atención la necesidad de revisar los protocolos y sanciones en el fútbol peruano, para garantizar la integridad física de los jugadores y la justicia en el juego.