Las empacadoras de Ondarroa se reúnen para discutir su situación actual y plantear nuevas iniciativas en medio de una crisis que afecta su labor.

El colectivo de Neskatilak-Empacadoras de Ondarroa, bajo la presidencia de María Ángeles Müller, llevó a cabo el día de hoy su asamblea general en la lonja de pescado local.

Durante esta reunión, revisaron las iniciativas llevadas a cabo el año anterior y discutieron nuevas propuestas para el presente.

A esta asamblea asistieron el Viceconsejero de Pesca, Leandro Azkue, junto a los directores Ixone Soroa y Koldo Goitia, quienes expresaron su preocupación sobre la falta de reconocimiento de las empacadoras como parte integral del sector pesquero.

También mencionaron la necesidad de clasificar adecuadamente las afecciones que sufren estas trabajadoras como enfermedades laborales, así como la media de edad del colectivo, que se sitúa en casi 52 años.

Actualmente, el grupo de Neskatilak está compuesto por tan solo 8 mujeres que se dedican a pesar, clasificar y preparar las cajas de pescado que provienen de los barcos de altura de la flota de Ondarroa.

Esta actividad es crítica, ya que trabajan en la lonja para diferentes empresas antes de que los productos sean subastados.

Es interesante destacar que el concepto de "Neskatilak" es exclusivo de este puerto vasco, donde estas empacadoras se enfocan en la pesca fresca. Ondarroa fue un puerto pesquero muy activo durante los años 80, contando con 10 barcos de altura y un número significativo de empacadoras que fluctuaba entre 200 y 250 mujeres.

Sin embargo, la situación actual es bastante diferente, con la cantidad de empacadoras profesionales reducida drásticamente a solo 8.

El descenso en la carga de trabajo, las reformas con coeficientes reductores para la jubilación y la llegada de nuevos colectivos que compiten en el mismo ámbito han llevado a esta crisis.

La labor de las Neskatilak es esencial y comienza cuando los barcos llegan y se descarga el pescado en la lonja. Ellas pesan cada caja, cambian el hielo y preparan el producto para la venta al día siguiente. En el caso del rape, también clasifican los tamaños del pescado, lo que es fundamental para la comercialización.

Koldo Goitia, director de Desarrollo Litoral, Puertos y Asuntos Marítimos del Gobierno Vasco, subraya la importancia de su trabajo, que se desarrolla principalmente durante las noches del domingo.

Este cambio en la dinámica laboral se ha adaptado a las nuevas demandas del sector, que ha visto alterado su esquema tradicional de capturas y descargas.

En 2004, las empacadoras de Ondarroa establecieron la Asociación "ONE-Ondarruko Neskatileen Elkartea" con el objetivo de gestionar y promover su actividad en el puerto.

Esta organización busca no solo mejorar las condiciones laborales de sus integrantes, sino también otorgar dignidad y estabilidad a su profesión.

Las Neskatilak enfrentan varios desafíos, incluidos la falta de reconocimiento en el sector pesquero y la baja en el volumen de descarte en el puerto de Ondarroa.

Las quejas sobre las enfermedades profesionales no reconocidas y el intrusismo laboral agravan aún más su situación.

Mientras el mar sigue siendo un recurso vital y la pesca una tradición arraigada en Euskadi, es imperativo que la labor de mujeres como las Neskatilak tenga el reconocimiento y apoyo que merece en un mundo en constante cambio.