El equipo de Racing, tras su histórica clasificación a las semifinales de la Copa Libertadores, enfrenta una serie de desafíos con varias bajas por lesiones que podrían afectar su rendimiento en el torneo. El entrenador Gustavo Costas trabaja con un plantel reducido y con opciones limitadas para el duelo en Brasil contra Flamengo.

La clasificación de Racing a las semifinales de la Copa Libertadores tras 28 años representa un hito en la historia del club argentino. La victoria en el Florencio Sola ante Banfield y los resultados de las jornadas anteriores permitieron al equipo de Avellaneda posicionarse en la élite del fútbol sudamericano, con la clara intención de conseguir su primer título en este torneo desde 1967.

Sin embargo, con el foco puesto en coronarse en la máxima competencia continental, el conjunto dirigido por Gustavo Costas enfrenta serios obstáculos debido a una serie de lesiones que merman las opciones del equipo y ponen en duda la disponibilidad de sus figuras principales para los duelos decisivos en Brasil.

Entre las adversidades que afronta Racing, se destaca la lesión de Juan Nardoni, quien sufrió un desgarro en el bíceps femoral de la pierna derecha durante los cuartos de final contra Vélez.

Su plazo de recuperación se estima en varias semanas, por lo que no estará para el encuentro de ida ante Flamengo en el estadio Maracaná, programado para el miércoles 22 de mayo.

La baja de Nardoni es un golpe importante, ya que el joven mediocampista había sido una de las piezas clave en la temporada.

Asimismo, Gabriel Rojas y Franco Pardo también se encuentran fuera por lesiones. Rojas sufrió un desgarro en el aductor de la pierna izquierda ante Vélez, mientras que Pardo presenta un desgarro en el bíceps femoral del miembro derecho.

La baja de estos jugadores restringe las opciones del técnico para la línea defensiva y el mediocampo, obligando a la búsqueda de soluciones de emergencia.

En la misma línea de dificultades, Gabriel Arias, el arquero titular de Racing, sufrió un esguince en el hombro derecho (especificado como esguince acromioclavicular), lo que lo mantiene en duda para el encuentro en Brasil.

La probable alternativa en la portería sería Facundo Cambeses, quien fue convocado por la selección argentina y recién llegará a Buenos Aires dos días antes del partido tras completar sus compromisos con la Albiceleste.

La posibilidad también contempla la incorporación del juvenil Francisco Gómez, de 21 años, que cuenta con poca experiencia en partidos de alta presión.

Por si fuera poco, Alan Forneris, volante de 20 años, también presenta un esguince en el ligamento colateral medial de la rodilla izquierda, tras haber participado solo en la primera mitad contra Banfield y ser reemplazado en el entretiempo.

La situación de Forneris complica aún más las opciones en el mediocampo.

La situación no se limita a las lesiones, ya que algunos jugadores clave también están en proceso de recuperación tras sendas lesiones. Marcos Mura, por ejemplo, podría ocupar una de las bandas en el sistema defensivo, mientras que Nacho Rodríguez también aparece en los planes del cuerpo técnico para disputar el encuentro en Brasil.

La duda principal es si Costas optará por mantener la línea de cuatro en defensa o apostará por una línea con mayor frescura y experiencia en cinco defensores.

El entrenador Gustavo Costas, consciente de las dificultades, expresó con sinceridad su malestar y optimismo a la vez. “Estamos con mala suerte en este momento, pero debemos seguir adelante, entender que la temporada es larga y que estos obstáculos son parte del camino.

Necesitamos que todos los jugadores estén preparados porque la competencia es muy dura, y en estos momentos cada aporte cuenta”, afirmó.

A pesar del difícil panorama, el técnico trabaja con esperanza y estrategia. La idea es recuperar a jugadores como Vietto y Zaracho, quienes vuelven de lesiones y son fundamentales en sus esquemas. En cuanto a refuerzos, el club barajó la incorporación de algún delantero o mediocampista para potenciar el plantel en la ventana de transferencias, aunque por ahora no se concretaron fichajes.

Por otra parte, la historia del club en el torneo continental refleja su esfuerzo y perseverancia. Desde su primera participación en 1967, Racing ha tenido altibajos, pero con la llegada de diferentes épocas de éxito, como la consagración en la Copa de Libertadores en 1967 y los títulos internacionales de la década del ’80, el club busca recuperar su grandeza.

La actualidad, con la clasificación a semifinales, promete un escenario de tensión y expectativa, en el que cada decisión y cada jugador serán determinantes para cumplir el sueño de conquistar la Libertadores después de más de medio siglo.